La Llenura Del Espíritu SantoMuestra

El Espíritu nos guía a vivir en unidad (Parte 2).

Todos los que habían creído estaban juntos, y tenían en común todas las cosas (‭‭‭Hechos‬ ‭2‬‬:‭44‬‬‬).

La oración más larga en toda la Biblia la hizo Jesús por sus discípulos antes de padecer como estaba escrito de Él. En ella rogó varias veces al Padre para que los suyos (la Iglesia) sean uno y en este día quiero tomar algunos versos que detallan este clamor (Juan capítulo 17).

11 Y ya no estoy en el mundo; mas estos están en el mundo, y yo voy a ti. Padre santo, a los que me has dado, guárdalos en tu nombre, para que sean uno, así como nosotros (‭‭‭Juan‬ ‭17‬‬:‭11‬). El Señor oró para que mientras estemos en el mundo el Padre nos guarde y seamos uno.

¿Para qué el Señor quiere que seamos uno mientras estemos en el mundo? Para que las personas crean en Él a través de nosotros (Verso 21). Muchas personas no creen en los cristianos porque estamos divididos entre nosotros mismos. Es impresionante como los concilios, sobretodo los más antiguos se creen superiores a otros, y como no apoyan a otras iglesias simplemente porque no pertenecen al concilio. Es duro de digerir pero es una realidad actual.

No fue casualidad que Jesús pusiera tanto énfasis en su clamor al Padre por los creyentes, sobretodo por los de esta época porque a Él no se le escapa nada, todo lo vio antes de que pasara. Veamos esta porción: 21 para que todos sean uno; como tú, oh Padre, en mí, y yo en ti, que también ellos sean uno en nosotros (‭‭‭Juan‬ ‭17‬‬:‭21‬).

Cuando el Espíritu Santo se derramó en Pentecostés comenzó a darle efectividad a este clamor. Por eso los miembros de la iglesia eran uno en el Espíritu y por consiguiente en el Padre y el Hijo como dijo Jesús. Por esa razón lo sobrenatural era natural en la vida de los primeros cristianos porque nadie buscaba lo suyo propio.

Ayer dije que si queremos ver a Dios manifestarse igual o más en este tiempo tenemos que hacer lo mismo que ellos hicieron. Pero, ¿realmente estamos dispuestos a derribar nuestro ego y hacernos a un lado para que el Espíritu Santo tome su lugar? El Señor nos ayude.