UNA ESPOSA INFIEL

EL ESTADO CIVIL NO DEFINE LA MORAL

José era un israelita que había sido vendido como esclavo por sus hermanos quienes estaban celosos de el. Cuando llegó a Egipto siendo esclavo fue comprado por un oficial del rey llamado Potifar. José se ganó su confianza y el lo nombró administrador de su casa y de todo lo que tenía. La esposa de este hombre se sintió atraída por José y diariamente le hacia acercamientos de índole sexual. Como José le temía a Dios, la rechazó y eso no le gustó a esa seductora mujer. Ella se enojó y lo acusó injustamente con su esposo diciendo que José había tratado de violarla. José fue a parar a la cárcel y aún desde allí él siguió ejerciendo su liderazgo.

Esta mujer tuvo una personalidad intrigante, por un lado, era una mujer casada, fina, poderosa e influyente. Por otro lado, era una mujer insegura, manipuladora, vengativa, dominante, mentirosa y caprichosa. Ella se creía importante, linda, irresistible, por eso cuando José la rechazó no pudo soportarlo y lo acusó como forma de venganza. Algunas mujeres creen que son irresistibles y que le tienen que gustar a todo el mundo. La realidad es que el físico no es lo único que importa para gustarle a alguien. En este caso, ella tal vez era hermosa, pero era casada y eso era suficiente razón para que fuera rechazada.

De esta mujer podemos aprender que:

• Se espera fidelidad en las relaciones de pareja. Cuando se tiene un esposo, no se pueden tener novios, amigos con beneficios, etc. por lo cual se debe evitar ser infiel o coquetear en persona, por teléfono o por internet con el sexo opuesto.

• No debemos aceptar manipulaciones y hostigamiento sexual de gente en el poder o personas con dinero. • Debemos poner en perspectiva cuando un hombre nos rechaza. No vamos a morirnos de amor por la opinión de un solo hombre en el mundo que no nos presta atención o tiene una mala opinión de nosotros. ¿De acuerdo?

• Los buenos valores y la moral nunca pasan de moda. No caigamos en la trampa de creer que vivir con buenos valores morales es vivir chapada a la antigua.

• No debemos acusar injusta o falsamente a ninguna persona.

• Manipular y presionar a un hombre solo empeora el rechazo.

• Es necesario investigar cualquier acusación, aunque sean en contra de personas que amas y confías.

• La belleza ni la influencia nos garantizan el éxito en nada.

• No debemos usar a una pareja u otra persona de escudo para tapar nuestras faltas o pecados.

Muchos pecados y malas acciones de mujeres casadas pasan desapercibidos porque nadie sospecha de ellas, ya que su estado civil y pareja le sirven de escudo. En esta historia nadie sospechó de la mujer infiel, mas bien sospecharon de José, quién era soltero. Podemos decir que ella tenía dos caras, una de ellas escondida detrás de su disfraz de mujer casada. Sabemos que las mujeres sin marido son las sospechosas de querer quitarle los maridos a otras mujeres, pero no siempre ese es el caso. Para algunas mujeres, el coqueteo con hombres puede parecer un juego, pero no lo es. Cuando se entretiene el marido de otra se está pecando y atrayendo maldiciones a nuestras vidas.