Como Viendo Lo InvisibleMuestra

La brújula correcta

¿Alguna vez pasaste por una temporada dónde te sentiste perdido y no sabías qué hacer? O quizá, ¿sentiste que necesitabas saber la voluntad de Dios, y no sabías encontrar la respuesta? Me imagino que sí, y yo también, más veces de las que me gustaría.

Hay una historia muy conocida sobre Pablo, cuando él quería ir a misionar a Asia, pero el Espíritu Santo no se lo permitió. Es decir, le revelo que no debía ir ahí. A veces esos no, Dios los revela con incomodidad o falta de paz. Cuando Pablo llegó a Misia, digamos que ajustó un poco el curso a Bitinia, pero el Espíritu tampoco le permitió ir allí, siguieron un poco más de camino pasando por Misia y descendiendo en Troas, y Pablo tuvo una visión donde vio a un macedonio pidiendo ayuda.

A lo largo de los años, en mi proceso, estoy descubriendo que Dios no se tarda en dar las respuestas, generalmente son sí, no o espera. ¡A veces confundí el no, como un eterno “espera"! porque estaba aferrada al sí. Otra cosa que descubrí, es que los sí de Dios, nunca son de golpe, generalmente lo va construyendo en tu vida. Pero hay momentos dónde sí me siento perdida y no sé qué pasos tomar. En ese, mientras tanto, a veces caí en depresión, enojo, fastidio, y algunas cosas negativas más. Pero descubrí, que cuando se trata de vivir por fe, Dios siempre te saca de tu zona de confort, y siempre vas a tener un futuro lleno de incertidumbre. Pero aprendí a amigarme con la incertidumbre, tomándola como la oportunidad de ver a Dios obrar, y no como algo negativo, siendo Él, suficiente para mí hoy. Aclaro el “hoy”, porque muchas veces cometemos el error de vivir extrañando lo pasado, o ansiando el futuro, y que Dios sea suficiente para mí hoy, me hizo encontrar paz, descanso y libertad de las cosas que me generaban ansiedad. Por otro lado, también descubrí, que es en la marcha también dónde Dios nos va guiando. Si nos equivocamos, como dice un dicho de mi país, “El que nunca se equivoca es porque nunca hizo nada”. Quédate tranquilo, porque como a Pablo, Dios siempre te va a guiar al camino correcto. Cuando yo pensé que algo era de Dios y no lo fue, como cuando emprendí un negocio y no funcionó, al no funcionar, me puse tan mal, que tuve que sentarme en la mesa y resolver cosas con Dios, donde si ese fracaso no hubiera sucedido, tal vez nunca hubiera tenido esas conversaciones con Él. Si estás esperando una respuesta, solo espera adorando y espera cuál es el siguiente paso.

Oración

Amado Dios, gracias, porque me enseñas a vivir por fe, porque Tú guías mi vida, porque en Ti encuentro paz, porque haciendo Tu voluntad, encuentro descanso. En el nombre de Jesús, amén.