El Logos, El Verbo, La PalabraMuestra

Escuchar la Palabra de Dios

No logro imaginarme cómo sería posible tener una relación profunda con mis hijos si no pudiera comunicarme con ellos. Las Escrituras nos aseguran que Dios, nuestro buen Padre Celestial, quiere comunicarse con nosotros y tan grande es su anhelo de hacerlo, que nos ha dado el don del Espíritu Santo; lo cual indica que tenemos acceso directo al corazón de nuestro Padre Celestial a través del Espíritu. 

¡¿No te parece esto maravilloso?! Poder conocer de forma directa la voluntad de Dios para tu vida, entender sus caminos y vivir con el conocimiento de Su amor.

Ahora, si quieres hablar con Dios, debes comprender que Dios y Su Palabra son inseparables, es por esto que, cuando lees las Escrituras con la ayuda de tu maestro, el Espíritu Santo, la Biblia ya no es solo un libro escrito hace miles de años, sino una fuente de revelación vivificante activa y veraz.

Jesús nos enseñó también que la oración es la llave que abre la puerta de los cielos, por tanto, es indispensable que antes de leer las Escrituras, ores, prestando atención a cualquier palabra, frase o idea que te llame la atención y permitas que Dios aplique Su Palabra directamente a tu corazón a través de la obra del Espíritu Santo en tu interior; enseñándote lo que es verdad, dejándote ver lo que está mal en tu vida y permitiéndole a Él que te corrija cuando estés equivocado y de paso te enseñe a hacer lo correcto.

Y mientras la lees y meditas en las Escrituras, sométete a Su autoridad eligiendo ser un hacedor de la palabra para que puedas ser bendecido en todos tus caminos (Lc 3: 21, Stg 1: 22-25 ).

Recuerda, la voz de Dios es perfecta y siempre veraz. Él nunca te guiará hacia algo que no sea lo mejor para ti. Él nunca te hablará con odio ni te condenará, Él tiene caminos de bien y no de mal para tu vida para que tengas un futuro lleno de esperanza.