El Misterio De Los Magos Muestra

  Más allá de la escena de la Natividad 

  Una parte de la historia de la Navidad que es muy misteriosa, muy inusual, pero también profundamente atractiva, es la llegada de los “sabios”, conocidos también como los “Magos”. Su relación con el nacimiento de Cristo parece casi fuera de lugar, y solamente en Evangelio de Mateo menciona su visita. No nos da ninguna explicación ni antecedentes de los Magos y, sin embargo, existe una clara importancia profética de su presencia. Ellos conectan con algo del pasado, anuncian algo sobre el presente, y predicen algo en el futuro.

En escenas de la Natividad populares, los Magos han sido representados como tres reyes montados en camellos que asistieron al nacimiento de Cristo junto con los pastores y los animales del establo, pero sabemos por la Escritura que varios aspectos de este folklore tradicional son incorrectos.

En primer lugar, los Magos no eran reyes. La palabra “Magos” se refiere a astrólogos paganos del oriente que buscaban conocimiento en las estrellas y los planetas, e interpretaban sueños. En segundo lugar, los Magos no acompañaron a los pastores a visitar a Jesús el día de su nacimiento, sino que llegaron en otra ocasión diferente.1 Finalmente, la Biblia nunca especifica que había solamente tres Magos. Lo único que sabemos es que su caravana era grande, porque toda Jerusalén se enteró cuando entraron en la ciudad (Mateo 2:3).

¡Qué intriga aportan a la historia de la Navidad! En lugar de, como dice la canción, “somos tres Reyes de Oriente…”, estos extranjeros que observaban las estrellas llegaron de lugares lejanos para buscar al Rey judío. ¿Cómo los dirigió una estrella hasta este Niño especial? ¿Por qué se atrevieron a llamarlo “Rey de los judíos”, confirmando sus elogios con regalos extravagantes? ¿Cuál era el significado de esos regalos concretos? Sigue leyendo a medida que descubrimos las respuestas a estas preguntas, que revelan un aspecto crucial, pero a menudo descuidado, de la historia de la Navidad: el misterio de los Magos.