Apartados Para ServirleMuestra

Dia 2  - Sé santo

Reflexiones:

Ser santo es tener una vida pura y apartado para servir a Dios, es decir, estar separado del pecado, de hecho, es ser como Jesús.

Lee nuevamente Juan 17:15-19 y toma un momento para responder las siguientes preguntas: 

➤   ¿Ya que Jesús no tiene pecado, ¿Por qué necesitaba santificarse a si mismo? 

➤   ¿Qué conclusiones podemos sacar?

➤   De acuerdo con este texto, haz una descripción completa de tu manera de comprender la santidad. 

Contenido:

Jesús continua su oración con estas palabras: "Y por ellos yo me santifico a mí mismo, para que también ellos sean santificados en la verdad" Juan 17:19 (RV60). Para entender bien la oración de Jesús, necesitamos establecer el significado de la palabra “santidad”. Ser santo significa estar separados de cosas profanas, para estar apartados para Dios o, en otras palabras, vivir para Dios y no para nosotros. ¿Cómo es posible esto?

En su oración Jesús dice algo completamente extraordinario: yo me santifico por ellos” Y sin embargo Jesús no tiene pecado, entonces, ¿por qué necesitaría santificarse? Por nosotros.

Jesús se consagró totalmente a la voluntad de Su padre a fin de que nosotros pudiéramos ser perfectos como Él es perfecto. Jesús vino a vivir como un simple hombre, Él dio su vida por nosotros, fue crucificado y murió. Al tercer día, resucitó y, desde ese momento, Él intercede por nosotros ante el Padre día y noche sin interrupción, esa es Su santificación para nosotros.

Jesús se apartó para nosotros cuando Él vino a la tierra. Él no hizo nada para sí mismo o según su propia voluntad, pero se consagró 100% para lograr lo que el Padre quería para que nosotros pudiéramos ser perdonados y reconciliados con Dios. Él no solo abrió el camino al Padre, sino que también nos mostró el camino para seguir una vida apartada para hacer la voluntad de Dios. Entonces, debido a todo lo que Jesús ha hecho por nosotros, nosotros no podemos quedar indiferentes y continuar viviendo para nosotros mismos. Estamos invitados a responder siguiendo Su ejemplo: Apartando nuestras vidas por completo para servirle a Él.

El hecho de apartarse para Jesús no es en absoluto un deber, es simplemente el resultado de una relación de amor por nuestro Salvador y Señor. Él no nos llama sirvientes, sino amigos (Juan 15:15). Una persona que está a punto de casarse, decide dejar atrás su vida de soltero. El estilo de vida y toda la vida misma de esa persona cambiará por amor. Es lo mismo para nosotros: es por amor y pasión por nuestro Señor y Salvador que decidimos enterrar nuestra vida, a fin de vivir para Cristo. Este mensaje de apartarse aparece regularmente a lo largo del Nuevo Testamento, como por ejemplo en Gálatas 2:20 o Romanos 12.1-2.

Entonces vemos que la sanidad no se trata de obedecer la ley y las reglas, es un acto de amor: morir a su antigua vida para vivir para Él ahora. Hacer las cosas por deber caen en el legalismo y la religión, que solo generan frustración y una forma de muerte, mientras que hacer las cosas por amor, generan vida en abundancia, la realización y encienden la pasión. Aprendamos a cultivar nuestra relación con Dios, porque es por amor a Él, que caminamos en santidad, evitando cualquier cosa que pueda entristecerlo o separarnos de Él.

Somos llamados a ser como Jesús. Ser santo es escoger ser como Él y vivir esa extraordinaria comunión con el Espíritu Santo para vivir como Jesús vivió, hacer lo que Él hizo y ser como Él era. Por lo tanto, ser santo, también se trata de hacer discípulos, sanar enfermos, hacer milagros y anunciar el evangelio.

Se trata igualmente de escoger separarse del pecado, dejar de hacer nuestra propia voluntad, de vivir lejos de Dios, obedeciendo los deseos egoístas de nuestra pequeña humanidad. Ser santo es escoger no ser más el centro de nuestro mundo a fin de hacer de Cristo el centro del mundo y hacer de su voluntad nuestra prioridad. Cuando Jesús estuvo en la tierra, nunca dejó de obedecer a Su padre y de hacer lo que Él le vio hacer (Juan 5:19-30). Ser santo consiste en manifestar la misma obediencia a Dios que Jesús tenía. Tomate un tiempo para reflexionar qué significa esto para tu vida y cómo puedes vivirla.

Mi decisión

Lo que comprendí para mi vida personal :

Lo que decido para mi vida, con lo que acabo de aprender :

Lo que tú decides hoy, determina quien serás mañana :

Del libro "un disciple en marche" copyright 2018 de Luc Favre, publicado por Vie Victorieuse. Todos los derechos reservados.