Antiguo Testamento con Fermín IVMuestra

Dentro del tabernáculo, en el lugar santo, debía estar la luz encendida en estas lámparas de aceite para siempre; y debía haber pan sobre la mesa que se cambiaba cada semana para siempre. La luz fue lo primero que Dios creo en Génesis y me recuerda su presencia constante, Dios será nuestra lumbrera en Apocalipsis. El pan es alimento y comunión. Podemos confiar que Dios siempre estará con nosotros, su presencia nos acompaña paso a paso y está dispuesto a tener comunión constante con nosotros.

En el resto de nuestra lectura se nos muestra cómo para Dios es importante que se honre su nombre, que se respete la vida y que se tenga libertad.

De una manera muy elocuente y clara, Dios nos muestra que nadie puede deshonrar su nombre. En este caso, l castigo es la muerte en este caso. Nadie puede blasfemar su nombre. ¿Quién puede atreverse a hacer algo así? Solo alguien que se cree superior a Dios, con autoridad sobre él; solo alguien que se siente juez sobre Dios. Una persona así es peligrosa no solo para la sociedad, sino también para sí mismo.

A la par, el castigo por asesinato también es la muerte. Una vez más debemos preguntarnos ¿Quién puede atreverse a quitarle la vida a un ser humano? Alguien que se cree superior a Dios, el dador de la vida. Alguien que se siente juez y jurado, que no necesita saber nada sobre la otra persona, solo le quita la vida.

Dios establece un limite: ojo por ojo, diente por diente. Nadie podía sobrepasarse de la falta que se cometió contra él. La venganza es algo que está en nuestra naturaleza y nadie nos detendría si no hubiera un límite. Al establecer estos límites, Dios le está dando valor a la vida.

Por último, Dios le da el valor a la libertad de las personas. Dios está regulando algo que ya existía, la esclavitud. Y estaba estableciendo, una vez más, límites. Dios establece darle libertad de dos maneras, en el año del jubileo y a través de un redentor. Dios le pone límite a la acumulación de riquezas. Todo lo que obtenías en propiedades, tienes que devolverlo en el año del jubileo. Esto representaba una oportunidad de empezar de nuevo para muchos en la comunidad.