Liderazgo desde ceroMuestra

Esperanza y perspectivas perdidas

Mientras la base de Saúl se desmorona, él últimamente se vuelve volátil y paranoico. Él inicialmente desarrolla una relación cercana con David, solo para volverse en contra de David repentinamente en el momento en que la gente se atrevió a cantar una canción traviesa en las calles:

“Saúl mata a miles, David a cien mil.”

Para un rey que ya tenía una base inestable de confianza personal mal colocada, esta canción fue probablemente el equivalente a sentirse pequeño, como una roca afilada frotando tu pie en medio de una larga corrida sin tener la habilidad de quitar tu zapato. ¡Auch!

Y a través de esto, David nunca dijo una palabra en contra de Saúl. El joven David pasó horas con Saúl en sus momentos más depresivos y despiadados. David testificó personalmente el tormento y el peso que derrivó a Saúl como resultado de sus decisiones desobedientes y su enfoque en sí mismo.

David no hizo alarde ni se unió a la canción que decía que él era un guerrero más poderoso que Saúl. Después, en la vida de David, mucho después de la muerte de Saúl, David continuó teniendo un corazón de honor y compasión para el primer rey de Israel elegido por Dios.

Aún así, la canción traviesa en las calles pareció cambiar la perspectiva de Saúl hacia David. El chico que alguna vez había sido un fiel servidor para Saúl, quien hacía todo lo que le era confiado bien, fue repentinamente una amenaza en los ojos de alguien que estaba ahora absorto en sí mismo. Mientras más Saúl iba por su propio camino y buscaba construirse a sí mismo desesperadamente, más desconfianza desarrollaba hacia los demás.  

Dejemos que esa sea una lección poderosa para nosotros. Cuando nuestro enfoque y nuestra fe cambian de la fuerza de Dios a la nuestra, los resultados siempre nos encontrarán aislándonos de nosotros mismos de alguna manera y perdiendo nuestra perspectiva de necesitar liderar a otros efectivamente. 

El liderazgo efectivo exige de nosotros tener una base fuerte para así poder tolerar la tensión cuando llegan los retos. Las bases fuertes nos permiten comunicar una dirección clara cuando otros empiezan a desviarse del camino. El viaje de Saúl hacia el liderazgo destaca la importancia de construir una base sólida de fe en Dios desde el comienzo. Construir liderazgo desde la raíz significa que no permaneceremos pasivos o escondidos de nuestro llamado hacia nuevos territorios, por el contrario, creceremos más fuertes con cada paso (grande o pequeño) que demos en obediencia a Dios.

Mañana discutiremos la mejor parte: Dios está a cargo de ayudarnos a poner las cosas de nuevo en su lugar. Él siempre está reconstruyendo, reparando, restaurando y centrando bases que se han desplazado. (¡Podría incluso suponer que Él ama una historia sobre "regresar" más que nosotros!)

Acción de liderazgo: 

• ¿Dónde necesitas una nueva perspectiva en un asunto? Escríbelo. Ahora escribe una nueva forma de pensar sobre el asunto, ¿o un posible resultado? ¿Qué dice la Palabra de Dios sobre eso?
• Recuerda, Dios está cargo de volver lo que podría considerarse "problemas en el cambio de juego" en victorias y testimonios. Empieza a agradecerle por momentos específicos en tu vida donde Él ha sido fiel. Una vez empieces, te aseguro que más y más situaciones vendrán a tu mente. No te detengas allí... anima a otros a tu alrededor a hacer lo mismo. ¡Haciendo esto, crearás un ambiente y cultura de agradecimiento y la confianza de que solo Él es una base sólida!