Grandes Héroes De La Fe: JosuéMuestra

Pasos de fe

Dirigirás a los sacerdotes que llevan el arca del Pacto: “Cuando llegues al borde de las aguas del Jordán, párate allí en la orilla del río" (Josué 3:8).

Antes de entrar a la tierra prometida, Dios le ordenó al pueblo de Israel que esperaran tres días junto a la orilla del río Jordán; los días pasaron y los israelitas vieron poco a poco, como el río crecía y se desbordaba por causa de las lluvias primaverales y la nieve que descendía del monte Hermón. Sin duda, en algún momento tuvieron que haber pensado, “¿Cómo vamos a cruzar este río?”. Pero, aunque el Señor no les dijo en esos días cómo habrían de cruzarlo, marcharon por fe cuando llegó el día porque tenían una promesa de parte del Señor.

Queridos, si Dios es omnisciente, es decir, que conoce todas las cosas reales y posibles que rodean nuestras vidas, podemos estar seguros y confiados que nada ha quedado fuera de su conocimiento. Por tanto, cuando Dios nos da una palabra, una instrucción o una indicación, podemos dar pasos de fe, aunque al frente de nosotros veamos muchas dificultades para “avanzar, enfrentemos desánimo o temor”. Lo podremos hacer porque sus directivas siempre serán las mejores para nuestra vida.

Un paso a la vez marchó Josué y los Israelitas tras el Arca como señal de la presencia y compañía de Dios El Señor; el paso por el Jordán fue un tipo de bautismo en el Espíritu Santo, el cual les permitía reclamar la promesa de Dios hecha a Abraham, Isaac y Jacob. Al igual que para nosotros hoy día, es imposible reclamar las promesas de Dios sin la guía, dirección y poder del espíritu Santo.

Querido amigo, si usted ha decidido por Dios y lo sigue por fe, debe saber que en muchas oportunidades tendrá que hacer ajustes a sus prioridades de vida con tal de obedecerlo por más extraña, rara o inexplicable que sea su instrucción. Tal vez te preguntes, por qué en oportunidades no logras avanzar o por qué tus oraciones no son escuchadas. La respuesta está en el nivel de dependencia y obediencia que desarrolles con Dios por fe. Israel y su paso del desierto a la tierra prometida nos dan testimonio de esto.

Recuerda, la Biblia describe la vida de fe como un andar. Habla de andar en el Espíritu, en los caminos del Señor, en el amor y en la verdad. Por tanto, los problemas imposibles en tu camino, no debes verlos como una prueba opresora, sino como una gloriosa oportunidad para obedecer a Dios y verle obrar a favor tuyo.