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Día 5

Fe que trasciende

Nehemías tenía la garantía de que El Señor les permitiría reconstruir la muralla, y en un principio fue su fe la que animó al pueblo para que cooperaran en la restauración. Cuando estaban a mitad de la obra, Nehemías volvió a animar al pueblo para que no desmayasen ante las amenazas de sus enemigos; y una vez terminada la reconstrucción, la fe de Nehemías no solo los había llevado a reconstruir un muro que estaba completamente en ruinas, sino que también produjo arrepentimiento de parte de todo el pueblo ante Dios, confesaron las obras maravillosas que Dios hizo al pueblo de Israel por siglos y se comprometieron a nunca más apartarse de su ley.

En el libro de Hebreros también vemos cómo José ordenó por fe que enterrasen sus huesos en la tierra prometida, Él no la conoció, pero sabía que, si Dios lo había dicho, Él lo iba cumplir en la siguiente generación. Esa es una fe que trasciende. Que puede llamar lo que no es como si fuese.

Tu fe tiene la capacidad de animar a otros, el testimonio sobre lo que Dios hizo en tu vida tiene el poder de animar a quien está pasando por la misma prueba que pasaste, no frenes tu boca de hablar las maravillas que Dios hizo en tu vida, puede producir aún arrepentimiento en los corazones de las personas alrededor tuyo. Te animamos a que hoy recuerdes todo lo que Dios hizo en tu vida y lo compartas con algún familiar o amigo de tu trabajo. 

Y así como tú fuiste animado por la fe de alguien a seguir creyendo por la restauración de tu familia, o por un nuevo negocio, tu fe puede animar a otros a hacer lo mismo. Habla a tus generaciones, si tienes hijos o nietos habla lo que Dios hizo contigo, las promesas que Dios te dio, y aún esas promesas que todavía no se han cumplido porque tal vez tú empezaste a caminar hacia ellas, pero serán tus hijos o tus nietos quienes las verán cumplidas.

Oración

Padre bueno, hoy ruego que me concedas hablar tus maravillas, que la fe que has puesto en mi pueda trascender y contagiar a quienes me rodean. Quiero hablar tus promesas, las cumplidas y las que aún están en ese proceso, para que mi familia vea cuan fiel y cuan bueno eres. En Cristo Jesús, Amén.