El Retorno: Nunca es demasiado tarde y nunca estás demasiado lejos. https://my. bible. com/reading-plans/1942-the-comebackMuestra

Historiadores y arqueólogos nos dicen que el pequeño lugar llamado Gólgota donde Jesús fue crucificado era en realidad un basurero. ¿Has visto alguna vez un basurero así de cerca? Moscas zumbando alrededor. Un mal olor en el aire. Donde quiera que se vea hay cúmulo tras cúmulo de basura podrida y hedionda. Y Gólgota era el peor de todos los basureros

Cuando los romanos iban a crucificar a criminales, a menudo no había nadie alrededor que reclamara los cuerpos. De manera que los soldados despegaban los cuerpos de las vigas y los lanzaban en la montañas de basura. Después los perros salvajes y otros animales se comerían la carne de los huesos. Ese fue el lugar donde Jesús fue crucificado, el peor basurero que se podría imaginar.

El hecho que Jesús le dijo al ladrón en la cruz de que podría estar con Él en el paraíso fue bastante significativo. Como ves, en ese día, el paraíso llego al basurero. El paraíso conectado a un basurero, y esa conexión era Jesús.

Pueda que hoy en día vivamos en un basurero, pero el paraíso todavía puede encontrarnos. Nuestra vidas puedan ser desordenadas en una forma asquerosa y moscas puedan estar zumbando alrededor de nosotros, pero Jesús siempre está cerca. Esas son buenas noticias, porque aún si nosotros estamos en un lugar realmente difícil, nunca necesitamos excluirnos. Siempre hay esperanza. Dios es el Dios del gran retorno.

¿Cómo comienza un retorno? Brota de la simple fe de un corazón que cree lo suficiente para hacer una oración básica: Jesús, por favor recuérdame. Esa oración solamente requiere de un aliento, apenas lo suficiente para cambiar la dirección de nuestra eternidad. Dios puso al criminal en la proximidad de Jesús porque Dios nos quería hacer saber que no necesitamos ser altos y poderosos para llegar al cielo. No somos bendecidos por Dios porque somos mejores que otros. Vamos al cielo por una simple oración de fe.

En esa oración reconocemos que no tenemos nada que ofrecerle a Dios. Llegamos a Jesús como desamparados en nuestro dolor y desesperados como un ladrón que esta extendido en una cruz. Vemos a Jesús en la cruz a nuestro lado y decimos: “Tú eres Dios. Tú eres inocente de cualquier crimen. Tú podrías bajarte de esa cruz si tú quisieras, pero estás ahí por tu elección, para un propósito. Por favor, ¿podrías recordarme?".

A veces hay personas que ponen más palabras alrededor de esa oración y eso está bien. Tú podrías entender más acerca de asuntos espirituales de lo que sabía el ladrón. Pero si tú sabes mucho menos, eso está bien también. Si todo lo que tú sabes es que Jesús era inocente, crucificado por cosas que no hizo, pero en las que formaste parte, y si tú crees que Jesús se pudo haber bajado de la cruz si el hubiera querido, pero permaneció allí por una razón, y tú solamente quieres que te recuerde, entonces tu oración es escuchada

Dios escuchará tu simple oración y traerá el paraíso a las más sucias situaciones y vidas. A Jesús no le da miedo la oscuridad. Él no se desanima por la fetidez de huesos viejos y podridos. Él no tiene miedo a unas cuantas moscas. Jesús traerá el paraíso aún a un basurero.

Responde

La historia del ladrón en la cruz demuestra que Jesús no era atraído hacia aquellos cuyas vidas estaban "perfectamente" en orden. ¿Qué esperanza te da eso hoy en día?

¿De qué forma ladrón que le pidió misericordia a Jesús entendió la gravedad de su situación? ¿De qué forma le has pedido a Dios que te recuerde?

¿Qué te dice esta historia acerca del alcance de la misericordia de Dios? ¿Qué te dice acerca de "estar demasiado lejos" para experimentar un retorno?

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