¡Sal de esa Caja!

Por Samara Pérez

Sal de la Caja donde tú mismo(a) te has metido

Como podrás notar, Gedeón se encerró en una caja de imposibilidades. El miedo comienza cuando tú mismo crees que no calificas. Esto es exactamente lo que vivió este personaje bíblico: pensó que la asignación que Dios le estaba dando le quedaba grande porque comenzó a descalificarse.

¿Cuántas veces te has sentido de esa manera? ¡Uffff! Yo, muchísimas. Recuerdo el día que tomé mi examen de conducción para que me dieran mi licencia: mi esposo me decía "Sé que lo lograrás porque tú eres muy inteligente y capaz". Me reí a carcajadas y le dije que eso solo lo decía porque me veía con los ojos del amor, y comencé a recordarle que era pésima al retroceder, torpe para estacionarme, indecisa para cruzar, olvidadiza para poner las luces de cambio, etc. Me lo creí tanto que tome el examen 3 veces. A la tercera vez, mi esposo tuvo que decirme: “Necesito que salgas de esa caja donde te has metido” y yo riendo le pregunté: "¿De qué caja me hablas?" y me respondió: "De la caja de las imposibilidades. ¡DIOS te ayudará, confía en El!".

¡Gracias a Dios que no he sido la única! Gedeón también estuvo en esa posición, pero Dios tuvo que recordarle que tenía que salir de esa caja, porque Él mismo estaría con él. Hoy te animo a que salgas de esa caja y recuerdes que Quien te acompaña es el que te dará la victoria.

Goals/Metas

• No te enfoques en el problema, sal de la caja y enfócate en la solución.
• El miedo comienza cuando te enfocas en tus defectos. Confía, Dios también te regaló muchas habilidades. ¡Úsalas!