[Serie La Experiencia del Éxodo] Devocionales de La Experiencia del ÉxodoMuestra

Siempre recuerda

En una Experiencia del Éxodo, cuando estamos en el lugar y el tiempo correctos para que Dios se muestre a su manera y en su tiempo, para su gloria y nuestro bien; cuando oramos con fervor y expectación; cuando esperamos en Él y damos el siguiente paso claro al reconocer que estamos rodeados por Él; cuando le permitimos trabajar a su manera y en el proceso edifica nuestra fe, estamos listos para la lección final. El apóstol Pablo habría puesto esta lección al inicio, la cual es que debemos alabarlo; incluso en el trabajo.

Vale la pena que consideremos un poco más de cerca las palabras del cántico que escribió Moisés y que entonó la nación porque en ellas vemos tres importantes verdades paralelas: debemos alabarlo, adorarlo y exaltarlo. Moisés nos dice que este cántico de alabanza al Señor es para que lo entonara la comunidad de creyentes. Levantaron este canto porque solo Él es digno de este tipo de alabanza a la luz de lo que hizo por la nación.

Siguiente, Él es adorado a causa de su glorioso triunfo, el cual es vuelto a contar en el cántico para que todos lo escuchen. La nación confirma quién es Dios para ellos, su fuerza, su canción y su salvación. Piense de nuevo en sus Experiencias del Éxodo y en todas las veces que Dios se mostró y fue su salvación —cuando literalmente le dio espacio para respirar— ¿no son dignas de su alabanza y adoración? ¿No son dignas de que levante un cántico a Él?

Finalmente, Moisés lo hace bastante personal. Declara que Dios es su Dios y el Dios de su padre y que es a quien alabará y exaltará. Lo que Moisés nos dice es que generaciones lo alabarán por lo que ha hecho, y se asegurará de que generaciones después de Él conozcan la magnificencia de Dios. ¿Nuestras generaciones conocerán la maravilla de nuestro Dios porque les hemos contado historias de su obra a nuestro favor? Pablo nos dice que un día las naciones, tribus y lenguas se inclinarán a sus pies y lo adorarán no solo porque es digno, sino por lo que ha hecho por nosotros.

Cuando Dios te libere a través de una Experiencia del Éxodo haz lo que han hecho los grandes líderes del pasado: recuerda alabarlo.

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