[El amor de Dios] El hijo pródigoMuestra

El viaje de regreso a casa

El viaje del hijo pródigo de regreso a casa, en realidad comenzó en el momento en que se fue. El día que reunió todo lo que tenía y salió de su casa, comenzó a regresar a ese lugar. Puede que no se haya dado cuenta en ese momento, pero la verdad es que cuando se fue, comenzó a perder. Comenzó a perder su dinero: gastó en cosas que no eran importantes, en personas que no lo amaban, en cosas egoístas y superficiales, tratando de llenar un vacío que no podía llenarse con ninguna de esas cosas. Perdió toda la comodidad que tenía en casa, perdió el contacto con su familia y perdió de vista lo que era realmente importante en la vida.

Cuando perdió todo lo que tenía, se dio cuenta de que necesitaba volver a casa. No creía que fuera digno del amor y el afecto de su padre otra vez, ni digno de su perdón, pero sabía que tenía que volver a casa. De vuelta a donde todo comenzó. De vuelta a donde se sentía seguro y tenía todo lo que necesitaba. De vuelta a casa, donde había dado todo por sentado. Después de aventurarse en un país lejano y gastar todo su dinero, se dio cuenta, de que en realidad, estar en casa era todo lo que quería.

¿Alguna vez te has aventurado al lejano país: «lejos de Dios»? Todos lo hemos hecho, de una forma u otra. Algunos de nosotros podemos haber aventurado más profundo, mientras que otros no tanto. Tal vez nos alejamos de Dios porque no obtuvimos lo que queríamos. Tal vez fue por una situación difícil en nuestras vidas, o tal vez porque alguien en quien confiamos nos lastimó. Tal vez fue porque solo queríamos ver lo que había allí afuera y que las cosas fueran de acuerdo con nuestros planes y no según los planes de Dios. Cualquiera que sea la razón, a lo largo de nuestras vidas, todos nos alejamos de Dios de alguna manera, aventurándonos en un país lejano como el hijo pródigo.

Después de haber gastado todo su dinero y quedado en soledad, hambriento, con frío y cansado mientras alimentaba a los cerdos, el hijo pródigo decidió que era hora de volver a casa. Tuvo que tocar fondo para darse cuenta de que desde el momento en que se fue, en realidad estaba de camino a casa. Necesitaba volver a casa, donde tenía todo lo que quería y necesitaba. Tenía que volver a los planes que su padre tenía para él.

Pensamiento del día 

Dios siempre nos está acercando a sí mismo, incluso cuando no nos damos cuenta. Siempre sintamos que nos atrae y que decidamos volver a casa con él y con sus planes perfectos para nuestras vidas.