Guía tu mente, guarda tu corazón y cuida tu lenguaMuestra

Es hora de que tengas un propósito respecto a lo que te piensas. Es hora de que hagas elecciones piadosas y santas que signifiquen que tu cerebro está siendo santificado, redimido y salvado. 

Si lees Filipenses 4:8, lo primero que debes notar es que ¡solo puedes pensar en cosas verdaderas! No debe haber fantasía, ni ficción, ni cuentos de hadas (sobre tu vida, la de otros o sobre cualquier circunstancia) en el cerebro que Jesús te dio. (No me refiero a leer o ver obras de ficción, incluyendo la fantasía y los cuentos de hadas, que elevan, iluminan o edifican, siempre y cuando en última instancia te lleven a Dios y a Su verdad). Si vas a dedicar algún tiempo a pensar en algo, debe ser una verdad absoluta. 

La segunda advertencia de Pablo y del Espíritu Santo es que tu mente debe enfocarse en lo que es honorable. Dios tiene un propósito elevado y noble para tu materia gris, e incluye pensamientos majestuosos y piedad. Tu mente está destinada a ser un gran lugar de pensamiento noble y reverente. Nunca fue hecha para ser un contenedor de basura para material de desecho de pensamientos triviales, superficiales o impropios. 

Dios también hizo que tu mente sea una de las partes más hermosas de toda tu persona. Tu mente debe ser exquisitamente agradable y perpetuamente amable. La belleza requiere un cultivo tierno y una atención constante; requerirá que te concentres totalmente en ella.

¡Dios hizo tu cerebro para que fuera un lugar de excelencia y virtud sin igual! No desordenes tu cerebro con pensamientos de baja categoría o con actitudes comprometedoras. Eleva tu nivel de pensamiento al de tu Creador.

Tus pensamientos deberían estar tan impregnados de adoración y gracia que incluso sueñes en tu lengua materna con optimismo y regocijo divinos. Tu cerebro debería estar entrenado para dar ovaciones de agradecimiento, palabras de aliento y muestras de acción de gracias.

Cuando empieces a seguir el consejo de Pablo, pensando en pensamientos verdaderos y honorables, tu vida se convertirá en la mejor vida posible: experimentarás la vida abundante.

Aplicación personal: 

¿En qué momento, en un período de veinticuatro horas, mi mente me lleva generalmente por el camino equivocado? Escribe tu respuesta. Luego prepara versículos específicos y cantos bíblicos de alabanza y adoración con los que puedas llenar tu mente en esos momentos.