Una Iglesia Feliz y SaludableMuestra

Mi Ministerio: Usted tiene dones A través de los años he conocido a algunos cristianos con un espíritu muy abatido. "No soy de ninguna utilidad para Dios. Merezco que me despidan del equipo. No tengo nada. Básicamente estoy matando el tiempo hasta que muera". Temo que, a menos que ocurra algo muy grande que cambie su manera de pensar, esos individuos pasarán toda su vida decepcionados, frustrados, malhumorados, deprimidos y odiándose a sí mismos. Ojalá hubieran leído 1 Pedro. La Palabra de Dios afirma que cada uno de nosotros tiene un gran valor para él, y también dones importantes para usarlos en su servicio: “Cada uno según el don que ha recibido, minístrelo a los otros, como buenos administradores de la multiforme gracia de Dios” (1 Pedro 4:10). El Señor no solo lo salvo a usted para que viva con él algún día, también lo salvó para que le sea útil ahora mismo. Si usted tiene problemas para identificar los dones únicos que Dios le ha dado, haga estas dos cosas: primera, pregúnteles a las personas que lo rodean por qué lo aprecian; puede llegar a sorprenderse. Segunda, escuche su corazón y determine en qué forma tiene el deseo de ayudar a las personas. Ahora llévele al Señor todo lo que le ha sido dado y devuélvalo a él.