Encontrando su camino financieroMuestra

Jesús dice que debemos diezmar.

A Dios le importa cómo administramos todo lo que Él nos ha dado. Si a Dios no le importara, la Biblia no tendría más de 2.000 versículos sobre el dinero y la administración del dinero.

Cuando se trata de honrar a Dios con nuestro dinero, el primer paso para cada cristiano es diezmar. El diezmo es devolver el primer 10 por ciento de sus ingresos a Dios a través de la iglesia local. Cuando recuperamos un porcentaje de nuestros ingresos en el diezmo, le agradecemos a Dios, demostramos que confiamos en Él y luchamos contra la codicia al poner a Dios primero en nuestras finanzas.

El diezmo no solo es importante para Dios, sino que es una parte esencial de la administración del dinero. Muchos han creído la mentira: "No puedo darme el diezmo". La verdad es que todos pueden darse el lujo de diezmar. Dios promete satisfacer todas nuestras necesidades y nos pide que confiemos en Él con lo que Él ya nos ha dado.

Piensa:
1. ¿Estás diezmando? ¿Por qué o por qué no?
2. ¿Qué dice acerca de Dios que Él es el dueño de todo, pero solo quiere que regresemos un 10 por ciento?
3. ¿En quién confías para mantener a tu familia? ¿Cómo se vería si confiamos en que Dios proporcionará?

Ora:
Querido Jesús, dame coraje para ponerte siempre primero en mis finanzas. Gracias por darme generosamente aunque no me lo merezco.