Aun así, alégrate

Bienaventurados los que padecen persecución por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos. Bienaventurados sois cuando por mi causa os vituperen y os persigan, y digan toda clase de mal contra vosotros, mintiendo. Gozaos y alegraos, porque vuestro galardón es grande en los cielos; porque así persiguieron a los profetas que fueron antes de vosotros. Mateo 5:10–12

COMENZAMOS

Celio Secondo Curione fue arrestado en 1523 por discutir la doctrina bíblica. Curione, un humanista italiano cuyo corazón se encendió con los escritos de Martín Lutero, fue confinado sumariamente en un convento, donde las autoridades eclesiásticas le instaron a considerar la naturaleza herética de sus ideas. Sin embargo, continuó leyendo a los reformadores y compartiendo su mensaje de gracia inmerecida con cualquiera que quisiera escucharle.

De hecho, se animó tanto con las Escrituras que llegó a retirar los huesos del relicario de un santo y los sustituyó por un ejemplar de la Biblia y la siguiente provocadora leyenda: “Esta es el Arca de la Alianza donde encontramos los verdaderos oráculos de Dios; estas son las verdaderas reliquias”.

Esta historia ilustra el latido de las últimas Bienaventuranzas de Jesús. Capturado por el poder salvador del Evangelio, Curione soportó con alegría la persecución y las represalias, reconociendo que la realidad del reino de Cristo era más apremiante que la seguridad personal o la aprobación.

DEVOCIONAL

Aunque la promesa bíblica de la paz es patrimonio de todo creyente en Jesús, también lo es la exigencia de que, como él, carguemos con una cruz.

OBSERVACIONES

Las Bienaventuranzas octava y novena identifican dos razones por las que la persecución se considera bienaventurada: cuando es por causa de la justicia (Mateo 5:10) o cuando uno es ultrajado e insultado por el nombre de Jesús (Mateo 5:11). Esta última es una reiteración y explicación de la primera, pues nuestro testimonio público de justicia consiste en nuestra identificación con Jesús.

En este momento cultural, trágicamente, hay muchas formas en que los cristianos provocan sufrimiento sobre sí mismos. Los que escupen odio o teorías conspirativas sin límites invitan a la burla o a la cancelación en las redes sociales. Aquellos que defienden el comportamiento feo o pecaminoso de sus políticos preferidos (en cualquier lado del pasillo) son acertadamente llamados hipócritas. Los que excusan las faltas de integridad diciendo que el otro bando lo hace peor son ridiculizados como cobardes practicantes del "¿y qué hay de...?".

Sin embargo, no debemos negar que los cristianos de hoy, incluso en el supuestamente tolerante Occidente, están siendo perseguidos por causa de la justicia. Los que se niegan a participar en la afirmación activa de estilos de vida no bíblicos vigentes en el mundo empresarial y académico pueden verse condenados al ostracismo, arrastrados a los tribunales o desempleados. Fuera de Occidente, los cristianos pueden enfrentarse a todo tipo de peligros por negarse a renegar de su fe o simplemente por el delito de identificarse como seguidores de Cristo.

Este relato “más denso” del Evangelio reconoce que estar “en Cristo” lo define todo en nosotros —cada ambición, actividad, propósito y relación—, una identidad y una vocación que inevitablemente ofenderán la sensibilidad del mundo.

APLICACIÓN

¿Por qué la persecución es una buena noticia, hasta el punto de producir alegría? En pocas palabras, es el privilegio de vivir por amor a Cristo. Es la alegría de abrazar ahora por la fe la recompensa última que se promete en el reino de los cielos. Los discípulos de Cristo, como Abraham, esperan la ciudad que tiene cimientos, cuyo arquitecto y constructor es Dios (Hebreos 11:10). Lamentablemente, sin embargo, es una alegría que sigue siendo ajena al mundo, que busca otro reino.

¿Vives una vida que suscita preguntas o asombro entre tus vecinos? ¿Persecución? ¿Cuánta alegría y gozo te produce vivir para Cristo? ¿Estás dispuesto a sufrir para experimentar esta peculiar alegría del Reino? ¿Qué te impide comprometerte de todo corazón con el Señor?

Para leer más sobre las Bienaventuranzas, consulta El Reino al revés: Sabiduría para la Vida desde las Bienaventuranzas de Crossway, aquí: https://www.crossway.org/books/the-upside-down-kingdom-tpb/