Victoria Sobre La Ansiedad Muestra
Razones para evitar la ansiedad
Hay muchas razones por las que debemos evitar la ansiedad.
Primero, la ansiedad va en contra de las Escrituras. En Mateo 6:25-34, Jesús dice tres veces en este pasaje: “No se inquieten, no se inquieten, no se inquieten”. Para aquellos de nosotros que somos creyentes, afirmamos que creemos en Dios y en Su Hijo, Jesús; que Él nos ama incondicionalmente y ha hecho promesas para satisfacer nuestras necesidades; y que Él es un Dios que guarda Su Palabra. Entonces, si todo esto es cierto, entonces vivir una vida llena de ansiedad no se ajusta a lo que somos como hijos de Dios. Y debemos lidiar con la ansiedad porque generará todo tipo de desánimo y derrota en nuestras vidas.
En segundo lugar, la ansiedad tendrá un efecto negativo en todas las áreas de nuestras vidas. Hay innumerables formas en que la ansiedad tiene un efecto negativo en nuestras vidas. Comprenderlos lo ayudará a comprender mejor las tensiones de su vida y te permitirá ayudar a otros a superar las suyas.
- La ansiedad divide tu mente. La ansiedad es una distracción. Su objetivo es tirar de ti en muchas direcciones diferentes para que no puedas concentrarte o enfocarte. Y cualquier cosa que divida tu mente desvía tu atención de asuntos importantes y nubla tu enfoque.
- La ansiedad ralentiza tu productividad. Hagas lo que hagas, si estás ansioso por ello, te retrasará. Si su mente está dividida y preocupada por la ansiedad, no puede prestar toda tu atención y energía a lo que debería concentrarse.
- La ansiedad afecta tu relación personal con otras personas. Todos conocemos personas que sufren de ansiedad. Cada vez que ves a estas personas, descargan las cosas en sus vidas por las que están ansiosos o preocupados, sin realmente tratar con ellas. Su ansiedad continua afecta su relación con todos los que los rodean, incluido tú.
- La ansiedad conduce a decisiones imprudentes. Cuando una persona está ansiosa, tiene tendencia a adelantarse: “Si no lo hago ahora, puede que me lo pierda”; “Si no me caso con él ahora, me lo perderé”. Las personas toman decisiones imprudentes porque están ansiosas por un futuro incierto y pierden oportunidades que tal vez no vuelvan a presentarse. Y siempre hay consecuencias cuando se vive de esta manera.
- La ansiedad te roba la paz y la alegría. No puedes tener alegría y estar lleno de ansiedad. No puedes tener paz y estar lleno de ansiedad. Tener paz significa estar “unido”, mientras que la ansiedad significa estar “separado”. Así que puedes tener uno u otro, pero no puedes experimentar ambos.
- La ansiedad es una terrible pérdida de tiempo y energía. Cuando estás frustrado, ansioso e inseguro acerca de las cosas, no puedes hacer lo mejor que puedes. No te sentirás lo mejor posible. Y esto conducirá a consecuencias que realmente no quieres en tu vida.
Dios no quiere que vivamos nuestras vidas llenas de ansiedad. Cuando pienso en todas las cosas que acabo de mencionar, no puedo imaginar vivir mi vida de esa manera. La ansiedad divide tu mente, desvía tu atención, ralentiza tu productividad, afecta tus relaciones personales, te lleva a decisiones imprudentes, te roba la alegría y la paz, y resulta ser una pérdida de tiempo y energía. Amigo, cualquier cosa que me haga eso, no lo quiero en mi vida.
Y te prometo que no lo quieres en la tuya.
Escritura
Acerca de este Plan
La ansiedad es una respuesta normal a incertidumbres que enfrentamos en la vida. Pero lo que hacemos con nuestra ansiedad, y qué tanto tiempo permitimos que viva con nosotros, es la clave. Únete al Dr. Charles Stanley mientras define esta emoción destructiva, te muestra cómo ganar ventaja y te ayuda de una vez por todas a encontrar la solución de Dios a la ansiedad, llevándote a disfrutar una vida victoriosa y llena de fe.
More