Viajando con Jesús - Devocional de Cuaresma de 40 díasMuestra

Cuando Jesús vio a Su madre y al discípulo amado parados cerca, les dijo:“Mujer, he aquí a tu hijo”,   y al discípulo: “Aquí está tu madre”. Desde entonces, ese discípulo la llevó a su casa.

Mientras Jesús colgaba en la cruz, lo que dijo, hasta ahí, estuvo enfocado en los demás. Pidió perdón para Sus crucificadores. Le dio la bienvenida al ladrón en el reino. Y en la lectura de hoy, Él cuida de Su madre María y de Su discípulo Juan.

Aún en la tortura y la humillación, Jesús no se enfocó en Sí mismo. Quería asegurarse de que su madre estaría cuidada. (Es un hecho establecido que el esposo de Maria, José, ya había fallecido). Jesús quería darle a Su discípulo amado el importante rol de cuidar a Maria. 

Aún desde la cruz, Jesús se despojó de lo que estaba más próximo a Su corazón: Su madre y Su amigo cercano..

Aplicación

¿A qué o a quién me estoy aferrando? ¿Me está mostrando Dios que debo dejar a alguien o a algo y que en esa sumisión confíe en Él?

Inclínate

Padre, sé que me aferro a algunas personas y a ciertas ideas de cómo podría ser la vida. Sí, da miedo dejarlas ir pero ayúdame a recordar que estoy entregando a esas cosas o personas al Dios que envió a Su Único Hijo al Calvario por mi causa. Amén