La Llenura Del Espíritu SantoЗразок

Tres cosas que nunca faltan cuando el Espíritu Santo toma su lugar (Parte 3).

46 Y perseverando unánimes cada día en el templo, y partiendo el pan en las casas, comían juntos con alegría y sencillez de corazón, 47 alabando a Dios, y teniendo favor con todo el pueblo. Y el Señor añadía cada día a la iglesia los que habían de ser salvos (‭‭‭Hechos‬ ‭2‬‬:‭46‬-‭47‬).

3. Crecimiento constante.

Donde está el Espíritu del Señor hay crecimiento, expansión y multiplicación. Si sucede lo contrario debe haber una revisión. El estado de estancamiento es un llamado de atención de Dios, haciéndonos saber que algo no anda bien.

El ejemplo de la Iglesia primitiva debe despertarnos. Dice que cada día se añadían los que habían de ser salvos. No dice cada semana, cada mes o cada año, dice cada día. Esto quiere decir que la Iglesia se mantenía en movimiento todos los días de la semana y como resultado había multiplicación.

Donde reina el Espíritu Santo se acaban las excusas y se activa la pasión por los negocios del Padre. Cuando no es así, habrá mucho de cada cosa y menos del propósito de Dios en la tierra que es expandir y sembrar a Jesucristo en el corazón de las personas.

Si ellos experimentaron tal crecimiento, nosotros también lo podemos hacer. Pero vuelvo y repito una vez más, el Espíritu Santo sigue siendo el mismo, los que cambiamos somos nosotros al sustituirlo con tantas cosas. Si entendiéramos que necesitamos más a Dios que las cosas que Él nos da, tendríamos mucho más de lo que tenemos ahora.

Actuamos como el pueblo de Israel, gente de poca fe. Guardando el Maná de hoy para después, dudando de que al otro día caerá fresco. Dios no te pide que no trabajes, si no que Su reino esté primero y como resultado todo lo demás será añadido (Mateo 6:33).

¿Estás lleno/a del Espíritu Santo? Tus prioridades lo revelarán. Si es Dios y Su reino, el resultado será crecimiento constante como pasó en aquel tiempo.