Un liderazgo transformadorSample
Lidera con ejemplaridad
Los líderes piadosos no basan su eficacia en su posición, sino en su carácter y en su ejemplaridad. Cuando Lucas escribe a Teófilo en el Libro de los Hechos explica la metodología ministerial que Jesús seguía: “En el primer tratado, oh, Teófilo, hablé acerca de todas las cosas que Jesús comenzó a hacer y a enseñar” (Hechos 1:1). Jesús hacía primero, enseñaba después. Él sabía que no existe mejor didáctica que un ejemplo tácito. Míralo maldiciendo a la higuera estéril para luego explicarle a sus discípulos sobre el poder de la fe. Obsérvalo calmando la tempestad y luego su suave amonestación sobre la esterilidad de la duda y el miedo ante los desafíos de esta vida (Marcos 8:22-25). Las palabras pueden ser persuasivas, pero el ejemplo convence.
Les Thomson cuenta que, en una ocasión, mientras visitaba México en un viaje de predicación, necesitó ir a la oficina de correos. Como no conocía el lugar, preguntó a un niño de la vecindad dónde estaba la oficina más cercana. El niño le indicó fácilmente el camino. Agradecido, Thomson le dijo al niño: –Gracias por indicarme el camino a las oficinas de correos. Si vienes esta noche a la iglesia, yo te indicaré el camino al cielo. A lo que el niño respondió descreído: –Si usted no conoce ni el camino a la oficina de correos, ¿cómo podrá entonces indicarme el camino al cielo?
Para ser un mejor líder no hay que hablar más, sino hacer más. El servicio da una autoridad incuestionable. Nada testifica mejor de nuestras creencias que nuestros actos. Por eso Jesús enseñó que el que quiera ser el mayor será el siervo de todos. La mejor manera de combatir el egocentrismo es sirviendo al prójimo y la mejor manera de liderar es siendo el primero que actúa. Ese es el camino, un liderazgo humilde, que sirve con diligencia, con ferviente desinterés, con un amor puro, de todo corazón.
Todo líder llamado por Dios debe ser vigilante sobre sí, no sea que con el pasar del tiempo vaya a creer que está por encima de ese supremo principio, el de la ejemplaridad. A la par, hay que cuidar las motivaciones. No hacer las cosas por aparentar, o porque se espera que lo hagamos, sino con ánimo pronto, como para el Señor, de buena voluntad y con alegría. ¡Oh que bendito privilegio es guiar a otros en este santo llamado de ser como Jesús!
Scripture
About this Plan
Todo liderazgo piadoso ha de ser transformador. Dios nos ha llamado a ser instrumentos de cambio en sus manos y para su gloria. Si usamos la Biblia como mapa infalible podremos ser eficaces en esta preciosa tarea. Tenemos que actuar, este es nuestro privilegio.
More