40 Días de AdoraciónSample

Estamos explorando cómo la sencilla oración “Jesús, confío en Ti” puede llenarte de paz, infundir coraje en tu corazón y comenzar tu día de la mejor manera posible. Durante tus primeros quince minutos con Dios, te animo a hacer de la confianza un hábito diario. Es demasiado fácil despertar con cosas que te agobian, ansiedades que intentan apretar, o presiones que atacan tu mente. Los pensamientos en sí mismos no son necesariamente incorrectos. Pueden ser cosas importantes que necesitas hacer hoy o problemas que deben resolverse. Pero si permites que estas cosas dominen tu alma, corazón, mente, voluntad y emociones sin enfocar tus pensamientos en Dios, te mantendrán abajo.

Leemos en 1 Pedro 5:6–7: “Así que humíllense ante el gran poder de Dios y, a su debido tiempo, él los levantará con honor. Pongan todas sus preocupaciones y ansiedades en las manos de Dios, porque él cuida de ustedes”. Humillarse es una postura de entrega y conduce a que Dios te levante en el momento y de la manera correctos.

La palabra griega traducida “pongan” en este pasaje significa arrojar o lanzar. La traducción de la Biblia Amplificada (en inglés) expande la frase de esta manera: “descargando todas sus preocupaciones [todas sus ansiedades, todas sus preocupaciones, de una vez y para siempre]”. No tienes que resolver todo o solucionarlo todo por ti mismo. Sí, debes ser responsable y trabajar duro, pero hazlo desde un lugar de confianza en Dios. Él es el único que puede llevar el peso del mundo.

Observa cómo la entrega conduce a la paz. Esa es la fuerza de la confianza: te permite entregar tu vida a Dios, y esa dependencia y confianza en Él traen descanso a tu alma.

Dios te invita a arrojar esas cosas sobre Él y dejarlas allí. No las recojas de nuevo. Si puedes depositar tus preocupaciones, cuidados, ansiedades, miedos y problemas en el Señor y no volver a tomarlos, Él te llenará con Su paz. Déjalos con Él mientras te sientas en Su presencia.

Ni siquiera salgas de la cama antes de depositar tus preocupaciones en Dios. Esto mejorará la forma en que piensas, sientes y tomas decisiones, y cambiará la trayectoria de tu día.

Preguntas para Reflexionar

1. ¿Qué significa para ti humillarte ante Dios, y por qué es importante?
2. ¿Cómo entregas genuinamente tus preocupaciones a Dios? ¿Puedes compartir una experiencia reciente en la que conscientemente entregaste una preocupación a Él?
3. ¿Qué pasos puedes tomar para dejar ir tus preocupaciones una vez que las has confiado a Dios y tener fe en Su cuidado?