CollateralSample
"Así que humíllense ante el gran poder de Dios y, a su debido tiempo, él los levantará con honor. Pongan todas sus preocupaciones y ansiedades en las manos de Dios, porque él cuida de ustedes." 1 Pedro 5:6-7 NTV
Recordemos que la palabra que usa el apóstol Pedro en nuestro versículo principal, en el original griego, es mérimna, de la que también podemos extraer el sentido de "dividir o fracturar el ser de una persona en partes"; el teólogo A.T. Robertson lo mencionó como "estar dividido en partes", lo que nos habla de estar dividido o separado internamente hacia diferentes direcciones.
Un mente dividida nos impedirá avanzar hacia el futuro maravilloso que Dios ha preparado para nuestras vidas. La ansiedad quiere encargarse de robarnos el tiempo, por el temor al futuro o la incertidumbre del provenir que no podamos controlar.
Necesitamos afirmar nuestros pensamientos y corazones en Dios. No debemos permitirle a estos pensamientos pesimistas y negativos que gobiernen en nuestra mente.
El apóstol Pablo dijo: "derribando argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de :
Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo." (2 Corintios 10:5 RV60)
Debemos traer cautivos todos estos pensamientos que nos alejan de los planes de Dios.
Pedro dijo "pongan todas sus preocupaciones y ansiedades en las manos de Dios" y esta expresión "pongan" es como arrojar, aventar o lanzar con fuerza, porque no es algo pasivo, sino un acto de fuerza. Tomar cautivos esos pensamientos y ponerlos a los pies de Jesús.
Así de importante son los pensamientos. Pablo no nos está diciendo que estos pensamientos no aparecerán en nuestra mente, pero sí nos está diciendo que no les permitamos alojamiento, debemos sacarlos con fuerza y llevarlo a Cristo.
"Porque cual es su pensamiento en su corazón, tal es él...." (Proverbios 23:7a)
Nuestros pensamientos más fuertes tienen el potencial de darle dirección a nuestra vida. Los pensamientos que se anidan en nuestro corazón modelarán gran parte de nuestras decisiones.
Necesitamos una renovación de nuestra mente diaria para luchar contra la ansiedad y las preocupaciones. Debemos desintoxicar nuestra mente de malos pensamientos que sólo nos alejan de la voluntad de Dios. El apóstol Pablo dijo: "renuévense en el espíritu de su mente." Efesios 4:23 RVC, que nos habla de ir a un siguiente nivel, a un espíritu, mente y actitud potenciada.
Podemos aprender a reemplazar esos pensamientos negativos por pensamientos de bien. Nuevamente el apóstol Pablo aborda este tema y nos dice: "Por lo demás, hermanos, piensen en todo lo que es verdadero, en todo lo honesto, en todo lo justo, en todo lo puro, en todo lo amable, en todo lo que es digno de alabanza; si hay en ello alguna virtud, si hay algo que admirar, piensen en ello." Filipenses 4:8 RVC.
Llenemos nuestra mente de pensamientos de bien en Cristo Jesús.