Criando Una Generación Que Conozca a DiosEjemplo

Ezequías

Ezequías es uno de mis personajes de la Biblia favoritos. Su historia comienza en 2 Crónicas 29.

No sé si te gusta leer historia, pero a mí me encanta, así que disfruto leer estos libros. En Crónicas vemos una lista de reyes, tanto de Israel como de Judá y algunas de las cosas que hicieron. Cuando se menciona que uno de estos reyes comenzó a reinar se nos dice si hicieron lo recto ante los ojos de Jehová o no.

Ezequías es uno de los pocos reyes que hizo lo recto ante los ojos de Dios y su historia me fascina. Algunas de las cosas que hizo fueron: establecer el culto del templo y organizó la distribución de sacerdotes y levitas.

Lee 2 Crónicas 31:21. Este versículo nos dice que este rey buscó a Dios de todo su corazón. ¡Ojalá alguien diga eso de nosotros!

En 2 Crónicas vemos varios eventos en la vida de Ezequías que nos hablan de su carácter. Fueron invadidos, pero Ezequías confió en Dios y Él lo libró del enemigo. Ezequías estaba a punto de morir, pero hizo una oración que Dios escuchó y le concedió 15 años de vida más (en 2 Reyes 20:1-11 se amplía más este evento).

Ezequías no era perfecto, si terminamos de leer el capítulo nos daremos cuenta de uno de sus grandes errores. Pero, seguramente con tanta cosa buena que tenía, él tuvo hijos que amaron a Dios y que hicieron lo recto ante sus ojos, ¿o no?

2 Reyes 20:21 nos dice que al morir Ezequías su hijo Manasés reino en su lugar. Pasemos al siguiente capítulo para saber que tan bien portado era Manasés.

Lee 2 Reyes 21:1-6. Manasés hizo lo malo ante los ojos de Jehová, tan malo fue que sacrificó a su propio hijo. Yo como madre no me puedo imaginar algo tan perverso en contra de tu propio hijo.

Al igual que con Samuel, no sabes cómo fue Ezequías como padre. No sabemos cuáles fueron sus errores. Sin embargo, una cosa me viene a mente: tenemos que estar muy pendientes de cómo están creciendo nuestros hijos y como es nuestra vida familiar. Manasés solo tenía 12 años cuando Ezequías, su padre, murió, así que sólo tuvo 12 años para influenciarlo a hacer lo bueno. ¿Quién estuvo con él el resto de sus años como menor de edad? ¿Quiénes fueron sus consejeros?

¿Su madre fue una mujer recta? Este es un punto super importante, debemos elegir con sabiduría la persona con quien nos casaremos. Esta persona debe compartir nuestras mismas creencias, si no ella estará instruyendo para un lado y nosotros para el otro lado. Esto afecta mucho la educación de los niños.

No quisiera deprimirte hablándote de más personajes que tuvieron hijos que hacían lo malo. Por ejemplo, David tuvo una familia muy disfuncional. En su familia se vio abuso sexual, homicidio, ambición y traición. ¡Y eso que David fue el único hombre al que se le llama un hombre conforme al corazón de Dios!

Si estos hombres, que fueron grandes siervos de Dios no pudieron tener hijos que sirvieran a Jehová de igual manera o aún mejor, ¿qué esperanza tenemos nosotros?

Sigue leyendo, porque todos tenemos esperanza en Cristo.

Lo primero que tenemos que hacer para criar hijos que sirvan a Dios es dar un ejemplo digno de seguir.

Yo crecí en la iglesia y te puedo contar de muchos casos que me tocó ver (y de seguro tú también has escuchado alguno), de padres cristianos, incluso con ministerios, que eran unos en la iglesia y otros en la casa. Eso afecta mucho a los hijos. Tenemos que dar testimonio no sólo para el mundo sino principalmente en nuestra casa.

Lifeway hizo una investigación ardua con familias cristianas que tenían hijos adultos, los cuales seguían siendo cristianos y profesando su fe. Llegaron a la conclusión que hay 5 disciplinas que se les inculcaron de niños y que los ayudaron a crecer en fe y a ser adultos cristianos. Estas son:

1. Leer la Biblia
2. Tener un tiempo regular de oración
3. Ir a la iglesia
4. Escuchar música cristiana
5. Ser parte de un grupo misionero

Así que, si queremos que nuestros hijos sigan siendo “cristianos” cuando crezcan deberíamos interesarnos en instruirles en estas disciplinas.