Recuerda Cuando Yo...Muestra

¿Alguna vez te ha costado sentirte agradecido, especialmente cuando las cosas no están saliendo como quieres o alguien te ha molestado? Te daré este consejo: practicar la gratitud puede ayudarte a dejar ir la ira y abrir un espacio para el perdón.

Piénsalo de esta manera: imagina que llevas una mochila que se hace más pesada cada vez que guardas un rencor o te mantienes enojado. Cada momento de ira es como una roca que metes en la mochila. ¡El peso aumenta rápido! Pero enfocarte en las cosas por las que estás agradecido es como quitar algunas piedras. Mientras más cosas tengas por las que estar agradecido, más ligera se volverá la carga.

Hoy, tómate un minuto para pensar en tres cosas por las que estás agradecido. Puede ser cualquier cosa: un buen amigo, un recuerdo divertido o, simplemente, un día soleado. ¡Inténtalo y verás cómo la gratitud puede ayudar a aligerar esa carga!