Un mensaje diferenteMuestra

Una experiencia personal con Jesús es algo impactante. Es muy difícil poner en palabras lo que sientes cuando estás solo en tu casa y tienes un encuentro profundo con Él. Es algo único e increíble. Eso es exactamente lo que Pedro y Juan sentían cuando hablaban de Jesús, y por eso no podían quedarse callados. Cuando vivimos algo tan real y poderoso, se vuelve imposible guardarlo.

Llamado a la acción: Recorda alguna experiencia reciente en la que sentiste a Jesús profundamente en tu vida. Mandale un mensaje a alguien cercano y cuéntale brevemente lo que viviste en esa ocasión. Hablá desde tu experiencia, y dejá que el Espíritu Santo te guíe. ¡Lo importante es no callar lo que Dios está haciendo en ti!