AnsiedadMuestra

La ansiedad como expresión del control

El deseo de controlar lo que no podemos manejar es una de las principales causas de la ansiedad. Aunque creemos que estar al mando nos ayudará a sentirnos seguros, en realidad, solo aumenta nuestra ansiedad. Estamos llamados a confiar en Dios, quien tiene el verdadero control de nuestras vidas y de nuestro futuro.
El control implica una constante verificación de lo que puede salir mal, lo que agota nuestra mente y cuerpo. En lugar de vivir en paz, vivimos en estado de alerta, anticipando posibles problemas. Dios, sin embargo, nos invita a confiar en que Él cumplirá sus promesas sin que nosotros tengamos que controlar el proceso. Filipenses 4:6-7 nos recuerda que debemos presentar nuestras peticiones a Dios con acción de gracias, y su paz nos guardará.

Aplicación práctica:
Entrégale a Dios las áreas en las que sientes que necesitas control. Ora y confía en que Él tiene el control de todo.