No Dejes De AmarMuestra

Refleja el amor mostrándolo a tu prójimo

El amor es un tema que se ha encajonado a pocos escenarios; como al amor entre parejas jóvenes que están en la etapa del noviazgo, dónde hay risitas nerviosas y regalos sorpresas, otro escenario se otorga al amor de una madre con su bebé recién nacido, quien luce feliz por el nuevo nacimiento. Sin embargo, el amor va más allá de una nota de romance o una linda fotografía, hoy vamos a estudiar las diferentes facetas del amor y lo que la Biblia dice al respecto.

La definición de prójimo es próximo, persona que se tiene cerca, también significa "otro" u otra persona, etimológicamente expresa la idea de asociarse con alguno, estar en compañía de, semejante, vecino, amigo, no se restringe solamente a un hermano o familiar, se extiende la palabra hasta un extranjero.

Con esta definición podemos entender que prójimos son todas aquellas personas que están a nuestro alrededor, familiares, vecinos, amigos, compañeros de trabajo, personas de otros países, etc. Etc.

¿Pero que nos dice la Biblia con respecto al amor al prójimo?

La Biblia nos enseña que amar al prójimo es un mandamiento….

ROMANOS 13:9-10

Porque esto: NO COMETERÁS ADULTERIO, NO MATARÁS, NO HURTARÁS, NO CODICIARÁS, y cualquier otro mandamiento, en estas palabras se resume: AMARÁS A TU PRÓJIMO COMO A TI MISMO.…

Sé que, muchos de nosotros conocemos los 10 mandamientos y tratamos de obedecer los que se refieren a Dios y quizá obedecemos alguno de los que se refieren al prójimo, pero no los tenemos tan presentes. Hoy vamos a recordarlos, son 6 mandatos relacionados al prójimo

· Honra a tu padre y a tu madre.

· No matarás.

· No cometerás adulterio.

· No hurtarás.

· No hablarás contra tu prójimo falso testimonio.

· No codiciarás.

Sin duda, Dios está interesado en que respetemos y no hagamos daño al prójimo, sin embargo, hay un mandamiento más que Dios pide que obedezcamos, y que va más allá, dice la Biblia en Levítico 19:18:

18 No te vengarás, ni guardarás rencor a los hijos de tu pueblo; más amarás a tu prójimo como a ti mismo: Yo Jehová.

Dios pide que amemos al prójimo como a nosotros mismos….

Amarnos a nosotros mismos nos lleva a hacer una serie de cosas por nosotros mismos, como cuidarnos físicamente, atender nuestras necesidades, hacer lo que nos gusta, disfrutar algo, nos cuidamos para no lastimarnos y la lista puede seguir...

Pero como leímos, Dios nos manda amar al prójimo de la misma manera en la que nos amamos nosotros mismos.

El amor implica tener hacia el prójimo actitudes de comprensión, respeto, ayuda y compromiso. El amor no se limita a un sentimiento, sino a un sentimiento con acciones en beneficio de la otra persona.

¿Cuánto amor has demostrado a tu prójimo? ¿Eres una persona atenta a las necesidades de otro? ¿O te limitas a atender tus propias necesidades y descuidas las de tu prójimo?

Dios conoce la importancia de vivir en sociedad, y sin duda, si todos guardáramos o conociéramos este mandamiento, nuestro mundo sería mejor, disfrutaríamos de una vida en paz, plena y abundante.

La Biblia nos cuenta una historia que Jesús enseñó a una persona que quería saber quién era su prójimo:

25 Y he aquí un doctor de la ley se levantó y dijo, para probarle: Maestro, ¿qué haré para heredar la vida eterna? 26Y Él le dijo: ¿Qué está escrito en la ley? ¿Cómo lees? 27Y él respondiendo, dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con todas tus fuerzas, y con toda tu mente; y a tu prójimo como a ti mismo. 28Y le dijo: Bien has respondido; haz esto, y vivirás. 29Pero él, queriendo justificarse a sí mismo, dijo a Jesús: ¿Y quién es mi prójimo?

30 Y respondiendo Jesús, dijo: Un hombre descendía de Jerusalén a Jericó, y cayó en manos de ladrones, los cuales le despojaron; e hiriéndole, se fueron, dejándole medio muerto. 31 Y aconteció, que descendió un sacerdote por aquel camino, y cuando lo vio, pasó por el otro lado. 32 Y asimismo un levita, cuando llegó cerca de aquel lugar y lo vio, pasó por el otro lado. 33 Pero un samaritano, que iba de camino, vino adonde él estaba, y cuando lo vio, tuvo compasión de él; 34 y acercándose, vendó sus heridas, echándoles aceite y vino; y poniéndole sobre su cabalgadura, lo llevó al mesón, y cuidó de él. 35 Y otro día al partir, sacó dos denarios, y los dio al mesonero, y le dijo: Cuida de él; y todo lo que de más gastares, yo cuando vuelva te lo pagaré. 36 ¿Quién, pues, de estos tres te parece que fue el prójimo del que cayó en manos de los ladrones? 37 Y él dijo: El que mostró con él misericordia. Entonces Jesús le dijo: Ve, y haz tú lo mismo.

Lucas 10:25-37

¡Cuán importante es amar al prójimo! Va muy asociado y de la mano con el mandato de amar a Dios. De hecho, la Escritura nos dice en el versículo 25 que, al cumplir estos 2 mandamientos, podremos "heredar la vida eterna". Pienso que esta es una gran razón por la que debemos cumplir con este mandamiento y no tratar de evadirlo o dejarlo para después, sino más bien recordarlo constantemente para poder cumplirlo.

Te invito a comenzar a obedecer este mandamiento, pídele a Dios sabiduría para poder vivirlo y demostrarlo a quienes te rodean, sé bendición, siente la carga del otro, ayuda en cuanto tengas oportunidad, sé amable. ¡Distínguete como un hijo de Dios que ama a su prójimo y obedece a Dios!