Logra un equilibrio

Abraza la tensión de la vida.

Tu Reto

• No digas nada negativo acerca de tu esposo a él mismo o a ninguna otra persona.
• Dile a tu esposo algo que admires o aprecies de él y díselo a alguien más, aparte de él.

«Y Jesús crecía en sabiduría, en estatura y en gracia para con Dios y los hombres» (Lucas 2:52).

En una reunión reciente con el personal de nuestra iglesia, mi pastor habló sobre el mito del equilibrio. Para ilustrar su punto, utilizó el ejemplo de las cuerdas de guitarra como una representación visual de la realidad de la vida: la tensión. La vida no se trata tanto de lograr un equilibrio; en cambio, siempre está tocando una fibra sensible con tensiones constantemente ajustadas. Cuando tratamos de equilibrar nuestra vida, inevitablemente encontramos que es como tratar de equilibrar un sube y baja al correr de un lado a otro. En Lucas 2:52, vemos a Jesús golpeando una sana tensión entre el favor con Dios y el favor con el hombre. La misma «tensión» debe buscarse en nuestras relaciones con nuestros esposos.

Como seguidores de Cristo que también están casados, experimentaremos una tensión entre nuestro deseo de servir a Dios y nuestro deseo de tener una gran relación con nuestro esposo. El matrimonio es un regalo de Dios y debemos honrarlo, mantenernos fieles a nuestros votos y buscar glorificar a Dios en la forma en que amamos a nuestro esposo. Pero mientras afinamos las cuerdas de nuestras vidas para brindar un sonido hermoso a los oídos de Dios, nuestro matrimonio no debe competir con afinar las cuerdas del crecimiento en nuestra fe y amor a Dios.

Como dice Pablo en 1 Corintios 7, no debemos centrarnos solo en nuestros matrimonios, sino en agradar al Señor en todo lo que hacemos. Cuando sintonizamos nuestras vidas con una tensión saludable como Jesús, crecemos en favor para con Dios y el hombre, y alcanzamos una especie de equilibrio que de otro modo nunca se podría lograr.

Oración

Padre, ayúdame a seguir el liderazgo de Jesús en amar a mi esposo y crecer en mi amor por ti. Ayúdame a buscar primero Tu reino y tu justicia, y al hacerlo, que eso me ayude a amar a mi esposo aún más. Dame sabiduría mientras vivo las tensiones de la vida para que seas glorificado en mi vida y en mi matrimonio.

Un testimonio de alabanza

«Si bien mi matrimonio es bueno, estaba atrapada en una zona de confort. ¡Este reto era justo lo que necesitaba para volver a apreciar a mi esposo! Él trabaja duro por mí y nuestras hijas, mantiene el jardín en buen estado y está felizmente activo en nuestras vidas, solo por nombrar algunas cosas. ¡Este reto me ha abierto los ojos para dejar de dar todo eso (y más) por sentado! Y si puedo seguir agradeciéndole, sobre todo delante de nuestras hijas, ¡qué gran testimonio será para ellas en sus matrimonios algún día!».

Reflexiona y responde

1. ¿Qué tensiones sientes entre servir a Dios y hacer crecer tu relación con tu esposo? ¿Hay áreas donde necesitas hacer ajustes?
2. ¿Cómo puedes buscar a Dios antes que ayudar a lograr el equilibrio en tu matrimonio y otras áreas de la vida?

Profundiza

Tómate el tiempo para considerar cómo manejar la tensión entre servir al Señor y tu relación con tu esposo. ¿Hay momentos en que pones a tu esposo antes de tu tiempo con el Señor? ¿Hay áreas donde podrías estar sirviendo en la iglesia que te hacen descuidar tu matrimonio? Pídele a Dios que te dé sabiduría para que puedas estar «sintonizada» en tu vida y tu matrimonio con la melodía que Él desea para ti.