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El perdón.

La palabra perdón es una palabra en extinción, hay muchas personas que no la utilizan y las que la utilizamos, no entendemos lo que con lleva el otorgar el perdón y el ser perdonado.

Podemos recibir heridas emocionales de nuestra familia, de conocidos y aun de no conocidos y nos llenamos de resentimiento, podemos tener heridas de años atrás y no se les ha dado la atención debida y en momentos críticos pueden salir para dañarnos más, cuando más hablemos de lo que nos hicieron, estamos impidiendo que esas heridas sanen.

Como las heridas físicas, las heridas emocionales deben ser atendidas y limpiadas para que cierren y cicatricen, para ello debemos acudir al perdón.

El significado de la palabra perdón es olvidar la falta que ha cometido otra persona contra ella o contra otros y no guardarle rencor ni castigarla por ella, o no tener en cuenta una deuda o una obligación que otra tiene con ella.

En la Biblia se refiere al perdón de dos formas. El Señor nos manda arrepentirnos de nuestros pecados y procurar Su perdón (HECHOS 3:19). También nos manda perdonar a los que nos ofenden o nos hagan daño (MATEO 6 14:15).

El perdón, es uno de los valores que nos define como cristianos, nuestro Señor Jesús nos enseñó que su Padre Jehová es bueno y misericordioso, capaz de perdonarnos aun siendo pecadores (SALMO 34:8). Aun con los errores que cometemos día con día, debemos buscar a Dios con humildad y abrir verdaderamente nuestro corazón, reconociendo que fallamos, que ya no lo volveremos a hacer y confesarlos a Él (2 CRÓNICAS 7:14).

Tenemos un Dios de misericordia (EFESIOS 2 4:5) y nos ama a tal grado que envió a su Hijo a morir por nosotros en la cruz para que fuésemos perdonados y reconciliados (JUAN 3:16), todos nuestros pecados fueron clavados en la cruz.

Nuestro Señor Jesús nos dio un claro ejemplo de amor (JUAN 15 12), hasta su muerte, es por eso que Él es el mejor doctor para sanar nuestras heridas del alma.

Como personas no alcanzamos a entendemos ese perdón por el dolor que produce, pero debemos de intentar dar ese amor a nuestros semejantes, a los que nos rodean aún a los que se consideren nuestros enemigos, (MATEO 5 43:44) sé que es difícil por nuestra condición débil ante el pecado que nos impide perdonar como lo hace nuestro Dios, ¿cuántas veces debemos perdonar? Las que sean necesarias (MATEO 18 21:22).

Cuando amamos al que no es amable, al que nos irrita, al que nos cae mal o al que nos lastimó, estamos amando con el amor de Cristo. El amor que debemos profesar como cristianos debe marcar la diferencia, es despojarnos de todo enojo, ira, resentimiento, venganza, violencia. Dios nos llama a amar sin esperar nada a cambio.

El otorgar el perdón te da una libertad, restaura relaciones rotas, nos libera del rencor y nos restaura la paz.

En su mensaje Dios es muy claro el cual nos rige como cristianos, y no es una opción si queremos vivir como tales (MARCOS 11 25:26).

Ten la plena conciencia de que Dios va más allá de nuestros pensamientos (ISAÍAS 55:9) y la obligación de perdonar no es un beneficio total para el que nos agrede, es un beneficio mutuo porque si perdonamos traemos bendición a nuestra vida (MATEO 6:4).

Así que te invito a reflexionar cada día, el perdón que nos da Dios día con día ya fue pagado y a precio de sangre por su Hijo. Por lo tanto, como cristianos debemos tratar de dar ese mismo perdón al que nos rodea por amor y agradecimiento a Dios (COLOSENSES 3:13)