Ora primeroMuestra

En la fe

Empieza con Dios. Dale lo primero y lo mejor de ti. Da con sacrificio. Y luego, espera a que Dios bendiga el resto. Él te hizo. Él te ama. Puedes confiar en que Dios verá tu corazón, tus buenas intenciones y tu seguimiento. Confía en que Él bendecirá el resto.

Quizá te estés diciendo: «¿Cómo terminará esto? No lo sé. Me temo que voy a tener menos dinero al mes si doy a Dios, pero voy a entregar mi diezmo a Dios de todos modos». ¿Adivina qué? Espera que Dios bendiga el resto. Dale lo primero. Dale lo mejor de ti. Confía en Él; no te defraudará. Él te ama.

Proverbios dice que busquemos la voluntad de Dios en todo lo que hagamos. Dice que Dios nos mostrará qué camino tomar. Así pues, ten una expectativa de bendición. Búscale a Él. Él te guiará e iluminará el camino que debes tomar. Búscale a Él y a su voluntad en todo lo que hagas. No te dejes impresionar por tu propia sabiduría; por el contrario, teme al Señor y apártate del mal. Si haces esto, tendrás sanidad para tu cuerpo y fortaleza para tus huesos. Honra al Señor con tus riquezas y con la mejor parte de todo lo que produzcas. Entonces, Él llenará tus graneros y tus tinajas rebosarán de buen vino.

Hay una historia sobre una carroza en el Desfile del Torneo de las Rosas justo antes de la Segunda Guerra Mundial. De repente, esta hermosa carroza empezó a chisporrotear y se paró de golpe. Se paró en seco. ¿El motivo? Se había quedado sin gasolina. Todo el desfile se detuvo hasta que alguien pudo llevar un bidón de gasolina a la carroza. Lo divertido era que la carroza estaba patrocinada por la Standard Oil Company. La carroza que representaba a la Standard Oil Company, con todos sus vastos recursos, es la que se quedó sin gasolina. ¡Es inimaginable!

Somos como esa carroza. Como cristianos, todos tenemos acceso al Dios Omnipotente. Pero si no recurrimos a Él, si no dependemos de Él, nos quedaremos sin gasolina. Tenemos que empezar por Él, comprometernos a darle lo primero y lo mejor de nosotros, dar de corazón y confiar en que Él bendecirá el resto.

Dios, ayúdame a tener fe. Aumenta mi confianza en ti.