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Conéctate

Cuando me di cuenta de que no sólo fui hecho para servir en la iglesia, sino para servir a otros como a la iglesia, conectarme con las personas se volvió fundamental. No podemos servir sin conectarnos y con quienes nos conectemos cambiará las historias que contaremos mañana. Esto es cierto a través de la historia. Mira al hombre que escribió más de la tercera parte del Nuevo Testamento, el apóstol Pablo.

Pablo no siempre fue cristiano. Antes, era Saulo, de Tarso, un hombre enojado que perseguía y asesinaba cristianos. Si no te gustan los admiradores de Jesús, te habría encantado Saulo. Luego de asesinar a quienes creían que Jesús había resucitado, Pablo se convirtió en uno de ellos.

Su transformación fue tan grande, tan radical, tan transformadora, que Saulo (quien fue llamado Pablo) quiso contarle a los demás sobre Jesús. El problema era que ningún cristiano confiaba en él por obvias razones.

El libro de Hechos de los Apóstoles, lo dice así:Cuando [Saul] llegó a Jerusalén, trataba de juntarse con los discípulos, pero todos tenían miedo de él, porque no creían que de veras fuera discípulo (Hechos 9:26 NVI). No podemos juzgar a los discípulos por su escepticismo, no quisiera tener el hombre que asesinó a cristianos el mes pasado dirigiendo la clase de estudio bíblico, ¿tú sí?

Pablo tenía un problema: no contaba con la credibilidad de otros cristianos, así que se acercaba a cualquiera que le diera la oportunidad de compartir su recién descubierta pasión. La decisión de conectarse no sólo cambió su historia, cambió la historia. ¿Entiendes? Pablo estaba a la distancia de un amigo de alterar el curso de su destino y ese amigo era un hombre llamado Bernabé.

Puedes estar a una amistad de distancia de cambiar tu historia.

Leeremos sobre el momento en que Bernabé se arriesgó al llevar a Pablo a los apóstoles, los líderes del pueblo que Pablo había intentado asesinar en su vida anterior. ¿Qué sucedió? Bernabé, el nuevo amigo de Pablo, puso en riesgo su reputación con Pablo y, gracias a Bernabé, los otros discípulos le dieron una oportunidad. El resto es historia. Puedes estar a una amistad de distancia de cambiar tu historia.

Estás a la distancia de un amigo de un mejor matrimonio, de una confesión de vencer una adicción, de una conversación de estar en mejor forma, de un mentor de entender tus dones y convertirte en un mejor líder.

Pregúntate:¿Qué debo hacer para conectarme con las personas indicadas? ¿Hay alguien con quien debo desconectarme?