La gloria de Dios en el cielo.Muestra

Lidiando con la frustración.

Por el Rev. Roger E. Woller

De alguna manera todos hemos experimentado la frustración. Cuando nuestro día no resulta como lo planeamos, nos sentimos frustrados contra nosotros y contra los demás.

Habrá algo que podamos hacer en vez de sentimos tan frustrados que deseamos rendirnos?

Comencemos admitiendo que todos hemos tenido esos sentimientos.

En el libro de Eclesiastés del Antiguo Testamento, Salomón nos dice que nuestras frustraciones son causadas por la vanidad de la vida. Deberíamos estar contentos con todo lo que Dios nos ha dado.

Nuestro bondadoso Dios nos otorga la sabiduría de la salvación y el conocimiento de que el cielo es nuestro hogar. Sentimos gozo sabiendo que somos pecadores perdonados porque Jesús pagó por nuestros pecados y frustraciones.

Al continuar viviendo y creciendo, estamos bendecidos al saber que nuestra vida eterna en el cielo es real. La Palabra de Dios y sus promesas nunca cambiarán. Dios y Su amor por nosotros es real.

Cuando nos damos cuenta de que nuestro Padre está en control, podemos sobreponernos fácilmente de nuestras frustraciones. Al ser hijos suyos, Él sabe por lo que estamos pasando.

Cuando nos sentimos frustrados, podemos acercarnos a nuestro Padre en oración. En 1 Peter 5:7, Pedro nos anima: “Depositen en él toda ansiedad, porque él cuida de ustedes”.

Oración: Amado Padre celestial, cuando me sienta frustrado, ayúdame a recordar que estás a mi lado. Tú enviaste a tu único Hijo, Jesús, a vivir una vida en mi lugar, ¿qué más podría pedir? Ayúdame a recordarlo. Amén