Ven, Señor Jesús VenMuestra

Vengo pronto

Lectura: Apocalipsis 22:12–13

DEVOCIONAL: Apocalipsis 22:12–13

¡Vengo pronto! Traigo mi galardón conmigo, para recompensar a cada uno según lo que haya hecho. Yo soy el Alfa y la Omega, el principio y el fin, el primero y el último.

En el Texto

En algunos de nuestros círculos cristianos, no hablamos mucho sobre esta idea de ser recompensadas ​​por nuestras buenas obras. Creo que nos hace sentir incómodas. Dado que sabemos que nunca podremos ganar nuestra salvación, un regalo gratuito de Dios, tendemos a ponernos nerviosas cuando surge el tema de las recompensas.

Pero en Apocalipsis 22:12–13, Jesús dice específicamente que cuando regrese, nos pagará de acuerdo a cómo vivimos nuestras vidas. Qué consuelo es esta promesa para aquellos que han sufrido mucho por el nombre de Jesús. Es alentador recordar que nada de lo que se hace para Dios se olvida ni se desperdicia. Jesús ve los sacrificios realizados. Él ve las injusticias infligidas a aquellos que se la jugaron por Su nombre. Él sabe las cosas que le han sido quitadas a Su pueblo, y no las ha olvidado. Debido a que Jesús es el Alfa y la Omega, Él lo ha visto todo, principio y fin, y nada ha escapado a Su atención. Él nos recompensará conforme haya sido nuestro trabajo.

Cuando Jesús vino por primera vez a la tierra, vino como un bebé. Cuando Cristo regrese, regresará como león rugiente, listo para traer juicio sobre la tierra.

Oración

Querido Señor, gracias por ser Santo y Bueno. Gracias por verlo todo. Nunca te pierdes una injusticia o un desamor. Gracias por no desperdiciar ningún dolor por el que paso. Gracias por sacar siempre el bien y el propósito de mi dolor. Aunque ruego que mi motivación principal para la obediencia sea mi amor por Ti, te agradezco por la promesa de Tus recompensas celestiales. Espero con ansias el día en que pueda ponerlos todos a Tus santos pies. Que pueda hacer todo para Tu gloria. Hasta el día glorioso en que Te vea cara a cara, seguiré orando ven, Señor Jesús, ven. Amén.