¿Cómo Orar Por El País Y Sus Gobernantes? Muestra

El mensaje de arrepentimiento del profeta Joel fue tan relevante para su época como lo es para nosotros hoy. El arrepentimiento es un cambio de dirección en la vida. La palabra misma significa cambiar de rumbo hacia la dirección correcta. Cualquier acción que no esté dentro de los propósitos de Dios, es motivo de arrepentimiento. Si tu vida está determinada por estándares de la sociedad, o si la ambición personal es más importante de lo que Dios plantea, entonces necesitas un cambio de rumbo. Por eso el profeta dijo: “Ahora bien afirma el Señor, vuélvanse a mí de todo corazón”.

En tiempos de los profetas era costumbre rasgar las vestiduras en lugares públicos en señal de arrepentimiento a causa del dolor por escoger el camino equivocado.

La Palabra de Dios nos dice que nos rasguemos el corazón como una actitud genuina de dejar el pecado y venir a Dios para someternos a Su voluntad. ¿De qué sirven señales externas sin la intención de cambiar?

No hay que confundir el remordimiento o las lágrimas con el verdadero arrepentimiento. Dios otorga su perdón cuando hay un anhelo profundo y sincero deseo de cambio. Dios es lento para la ira y grande en misericordia.

Demos gracias a Dios que hoy, en Cristo Jesús, tenemos la oportunidad de perdón y restauración. Volvamos a Él con un corazón arrepentido que quiere siempre hacer su voluntad en cada aspecto de la vida y que esta también sea nuestra oración por nuestros gobernantes.

Oración: Señor hoy te pido para que los gobernantes de mi país se vuelvan hacia ti. Que puedan arrepentirse delante de ti para que haya un genuino cambio en la dirección de su modo de vivir. Gracias por que en estos días tú me has recordado que eres el Soberano de los poderosos de la tierra y que en ti podemos confiar.