Logo de YouVersion
Ícono Búsqueda

Necesito un lugar para congregarmeMuestra

Necesito un lugar para congregarme

DÍA 1 DE 4

No quiero ir

Hay momentos tan difíciles por los que pasamos en una congregación que es inevitable perder el deseo de asistir a ese lugar donde creemos que en lugar de estar siendo levantados por el poder de la Palabra, somos más bien, en algunas ocasiones, menospreciados y abatidos por las actitudes de los mismos hermanos. Podemos llegar a sentir que de nada sirve que haya una buena interpretación y exposición de la Palabra si no se pone por obra. No tiene sentido hablar la verdad y vivir en la mentira, hablar de la Luz y reconocer la Luz, pero vivir en la oscuridad.

No quiero ir, no quiero ir a una congregación donde es evidente que no hay amor, unidad, compasión; a una congregación donde el pastor es el único que siempre tiene la razón, el único que nunca se equivoca y si se equivoca, siempre hay un buen propósito con ello. Sin embargo, cuando son los demás los que están fallando, todo el peso de la in-misericordia y el señalamiento debe recaer.

No quiero ir a un lugar donde haya que tolerar la hipocresía de los hermanos que, sabiendo que no se soportan, se les nota el intento que hacen en sus propias fuerzas por aparentar una falsa piedad y una falsa expresión de amor que, en realidad, los pone cada vez más al descubierto porque es evidente el malestar que hay en ellos y que se manifiesta hacia los demás a través de sus actitudes de desprecio y apatía. Noten bien, en ellos, pero ¿yo en dónde quedo? No nos digamos mentiras, pero nosotros también debemos incluirnos ahí porque si estamos percibiendo algo así, es porque también somos partícipes de lo mismo. El vínculo que entrelaza una congregación es el mismo vínculo que se vive en un matrimonio; es decir, somos uno solo, así que lo bueno y lo malo nos atañe a todos.

Ese "no quiero ir" podría interpretarse como una queja interna que explica y expone la incapacidad e inmadurez que tenemos para soportar con paciencia a nuestros hermanos, para mirarlos y amarlos de la misma manera en que Dios nos ve a nosotros a través de Jesús.

Día 2

Acerca de este Plan

Necesito un lugar para congregarme

En algún momento podemos sentir que la congregación en la que estamos no es el lugar en el que quisiéramos estar. "Necesito un lugar para congregarme", es una exclamación que normalmente expresamos en momentos de dificultad congregacional, entendiendo que nos es necesario pasar por ahí para perfeccionarnos en el amor y la unidad a la que somos llamados como hijos de Dios.

More

Nos gustaría agradecer a Marysela Ocampo O. por proporcionar este plan. Para obtener más información, visite: https://www.facebook.com/confiadosenJesucristo/