No te lo reserves.

Imaginemos un vaso lleno de agua sucia al que se le quiere echar agua más purificada. Para poder verter esa agua en el vaso, primero debe de ser derramada la que ya tiene. De lo contrario el agua se echará a perder.

Iniciemos…

Cada día somos llenos con algo nuevo que aprendemos, con algo que escuchamos o con una experiencia que vivimos, pero resulta más fácil reservárnosla que compartirla. Cuando nos hacemos dueños egoístas de lo que tenemos limitamos la forma en que podemos ser de bendición para otros, ponemos barrera para poder recibir lo nuevo de Dios en nuestras vidas. Solamente haciendo lo que hasta el momento hacemos, no experimentaremos cosas nuevas ni tampoco podremos ser transformados para llegar a un nivel superior del que nos encontramos.

No te reserves nada de lo que el Señor te ha dado para que puedas ser totalmente llenado de su gloria y de lo que él tiene nuevo que darte, porque para ser llenado primero debes de ser vaciado.

Podemos ver como la Biblia nos insta a desechar lo viejo para poder recibir lo nuevo en el libro de Efesios 4:22-24 .

Hoy te invito a cumplir con los siguientes retos y a que lo compartas con nosotros a través de nuestro IG: @unalmaparaDios

Reto 1: Comparte con alguien algo que hayas aprendido o aconséjale conforme a alguna experiencia.

Reto 2: Si hasta hoy has sido edificada a través de este plan de lectura, no te quedes con ello e invita a otras amigas a ser parte de las bendiciones que él te ha permitido tener a ti.

Reto 3: Si por parte de Dios has sido bendecida en varias áreas de tu vida, te invito a que primero identifiques una persona necesitada y que le des, no de lo peor que tengas, sino aun de lo mejor que tengas. Esto aplica para alimentos, ropa y demás.