Daniel: Una Vida Consagrada a DiosEjemplo

Palabras cerradas y selladas, que han sido abiertas

El libro del profeta Daniel, ha sido evitado por muchos de nuestros hermanos, esto debido a que contienen gran cantidad de revelaciones y visiones experimentadas por este siervo de Dios.

Las palabras del libro de Daniel, fueron cerradas y selladas hasta el tiempo del fin; esto nos los dice las escrituras; pero es importante que comprendamos que Dios, esta anhelando que muchos de nosotros deseemos experimentar cosas sobrenaturales como las que pudieron ser reveladas y vividas por Daniel.

Meditada en como puede estar algo cerrado y sellado, si esta plasmado en mi Biblia y lo puedo leer constantemente? e incluso Daniel dijo: "Y yo oí, mas no entendí" (Daniel 12:8 RVR1960).

Posteriormente le fue dicho a Daniel, que al acercarse el tiempo del fin; se levantaran siervos que serán limpiados, emblanquecidos y purificados; para que entiendan y comprendan lo revelado en este libro.

Enfocados en aquellas palabras dichas por Jesús a sus discípulos: "Porque a vosotros os es dado saber los misterios del reino de los cielos" (S. Mateo 13:11 RVR1960).

La palabra de Dios, es revelada por medio de su Espíritu a quienes desean y anhelan comprenderlas, con la finalidad de transmitir el mensaje de salvación a los demás.

El leer y oír algo, no quiere decir que lo entendemos y comprendemos; pero si pedimos la revelación al padre, él nos la dará sin reproche.

En estos tiempos debemos tener mucho cuidado con lo que escuchamos, oímos y vemos; ya que las escrituras nos dicen: "Pero el Espíritu dice claramente que en los postreros tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios" (1 Timoteo 4:1 RVR1960)

Por lo que debemos estar muy atentos y discernir por medio del Espíritu Santo, lo que Dios desea transmitir a nuestras vidas.

Es necesario que consagremos nuestra vida a Dios, para que él pueda derramar sobre nosotros todo conocimiento, inteligencia en todas las letras y ciencias, y entendimiento en toda visión y sueño; recordemos que esta época no cuenta con la presencia de Daniel; pero Dios cuenta con cada uno de nosotros, para que el mundo entero pueda contemplar y entender el cumplimento de su palabra.