Los Intocables - Proceso De Covid-19Muestra

3. Recibiendo la sanidad 

Este es un día que nos da el Señor para que, en medio de la enfermedad, Su poder nos perfeccione. Como sabes, estamos hospitalizados. Debemos estar 14 días en cuarentena como regla general, los síntomas en casi todos empiezan a retroceder, pasamos muchas noches en oración, pidiendo al Señor que este cuadro no se agudice. Nos despojamos de todo peso, diciendo: “pase lo que pase, del Señor somos”. No deseo que nos veas como superhéroes, pero llegamos a este punto porque en el mes de abril nos cambió la vida y vimos como 6 familiares enfermaron por Covid-19 y 3 de ellos partieron al lugar eterno (Consuelo, Alberto, Javier). Una situación de esta magnitud te deja una huella en el alma, aprendes a confiar en Dios y  en que lo que está ocurriendo es Su voluntad soberana. 

Volvamos a la historia del leproso y Jesús. Hay una conversación muy interesante; el leproso pregunta si Jesús quiere sanarlo, y Jesús responde: “QUIERO”. Esto habla mucho del corazón de Jesús en lo que desea para nuestras vidas. Quiere sanarnos, entiende nuestros dolores, y aunque el leproso era considerado un inmundo (INTOCABLE), Jesús demostró compasión diciendo “sí quiero”. 

Luego, no todo se quedó en palabras. Acto seguido lo TOCÓ. Jesús tocó al leproso y le cambió la vida. Se hizo cargo de su problema. Hoy Jesús te dice: “SÍ QUIERO”. Te entiendo, sé que sufres, pero YO estoy contigo. Vas a vivir aflicción, pero lo tengo todo preparado para ti. Esta situación es pasajera, fui al cielo a prepararte morada. Lo que ves ahora no será el final, sino el comienzo. 

Oremos:

Señor, me acerco a ti diciendo gracias por todo, aunque no soporte lo que experimento, no dejaré de alabarte, sabiendo que todo lo que ocurre es por tu soberanía. Gracias porque estás conmigo en esta aflicción. Confío en ti, en el nombre de Jesús. ¡Amén!