Estamos Mas Que Seguros en Las Manos De DiosMuestra

Dios actúa en tu vida para bien

Sabemos, además, que a los que aman a Dios, todas las cosas los ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.

Este es uno de los versículos más conocidos de la Biblia y una de sus promesas más vivificantes; un fundamento seguro sobre el cual apoyarse en las tormentas de la vida y una fuente de consuelo siempre inagotable. Contiene cuatro certezas inquebrantables.

En primer lugar, Dios actúa en tu vida. Siempre está actuando, de forma personal, única y continua. Él te está moldeando, sanando, atrayendo y transformando. Siempre está trabajando en tu vida porque tú le importas mucho. ¿Qué está haciendo Dios ahora mismo? Presta atención.

En segundo lugar, Dios actúa en tu vida para bien. No necesariamente para tu éxito, comodidad o felicidad, sino para tu bien. En el Antiguo Testamento, los propios hermanos de José lo traicionaron y lo vendieron como esclavo en una tierra extranjera. ¡Qué dolor y angustia soportó durante años! Pero Dios lo hizo para bien y finalmente elevó a José a Primer Ministro de todo Egipto. En Génesis 50:20 dice: «Ustedes se propusieron hacerme mal, pero Dios dispuso todo para bien. Él me puso en este cargo para que yo pudiera salvar la vida de muchas personas».

Tercero, Dios está trabajando en tu vida para bien en todas las cosas. Esta es la parte increíble. No algunas cosas o muchas cosas, quizá la mayoría de las cosas, sino todas las cosas, incluso las cosas que son malas, trágicas o malvadas. Dios las tomará y sacará el bien de ellas. De alguna manera, algún día, Dios las redimirá, sea lo que sea.

Cuarto, esto es cierto para los creyentes. Esto es cierto para los que aman a Dios y son llamados según su propósito. No esperamos simplemente que todo esto sea cierto. Lo sabemos. «Sabemos que Dios hace que todas las cosas ayuden a bien». Todas las cosas. Nada que Dios no utilice para el bien nos tocará. Nada.

José en el Antiguo Testamento es un magnífico ejemplo de esta verdad, pero el mejor ejemplo es el propio Jesús en la cruz. Cuando hombres malvados clavaron a Jesús en una cruz, fue el peor pecado, el mayor crimen de toda la historia. Pero desde el punto de vista de Dios, fue el mayor acto de amor e hizo más bien que cualquier otra cosa en la historia.

Lo que el hombre quiso hacer para mal, Dios lo destinó para bien. Cualquier cosa que te ocurra, Dios la redimirá para bien. «Dios tendrá la última palabra y siempre será buena».