[Grandes Versos] Siete Consejos De Un ApóstolMuestra

Confía en la Palabra de Dios

Llegando al final de su vida, Pablo escribe a su joven discípulo, Timoteo, que todas las Escrituras son inspiradas por Dios. Deja que esto te marque: las palabras de la Biblia provienen del aliento mismo de Dios.

Este es un libro como ningún otro libro y estas son palabras como ninguna otra palabra. Estas frases están llenas de vida, poder y gracia. Estos párrafos pueden transformar vidas y cambiar las eternidades. Estas palabras son las propias palabras de Dios.

Hay tantas palabras hoy en día: en correo electrónico, Twitter, Facebook, periódicos, revistas, libros, radio, televisión y correo basura. Tantas palabras, pero todas son palabras humanas. Las palabras de la Biblia son palabras de Dios, inspiradas por el Espíritu de Dios. Necesitamos oírlas, leerlas y prestarles atención.

No puedo explicar cuánto ha significado este libro para mí. Tomarme el tiempo para empaparse de estas palabras día tras día durante más de cuarenta años ha significado el mundo para mí. Dios se me ha revelado a sí mismo. Me ha mostrado quién es Él y quién soy yo. Me ha mostrado la naturaleza de la vida, la verdad y la realidad. Él me ha conocido, me ha alentado, me ha guiado. En los momentos más oscuros de mi vida, cuando me sentí abrumado, deshecho y no estaba seguro de que lo lograría, la Biblia fue una roca sobre la que pude apoyarme, un fundamento seguro en las tormentas de la vida.

No hay reemplazo. No hay sustituto para este libro. Abraham Lincoln escribió una vez: «Creo que la Biblia es el mejor regalo que Dios ha dado al hombre. Todo el bien del Salvador del mundo se nos comunica a través de este libro. He sido llevado muchas veces de rodillas por la abrumadora convicción de que no tenía a dónde ir».

Todos los días, a solas con Dios y una Biblia abierta respira estas palabras de verdad, frases de esperanza, palabras de vida. Palabras inspiradas por Dios.