Andad como sabiosMuestra

Mirad, pues, con diligencia cómo andéis, no como necios sino como sabios, aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos. Por tanto, no seáis insensatos, sino entendidos de cuál sea la voluntad del Señor. Efesios 5:15-17

2. Andar como sabios conlleva actuar con diligencia en el uso del tiempo – parte I

Especialmente la diligencia se relaciona en el uso del tiempo: Aprovechando bien el tiempo. El valor del tiempo que es igual al valor de nuestras vidas. Cuando el tiempo se nos escapa de las manos, con él se escapa también la vida, porque el tiempo es la materia prima de la que está hecha la vida; sólo tenemos una vida por un tiempo determinado. La forma como una persona valora su vida, es proporcional a la forma como valora su tiempo.

Hay dos palabras griegas utilizadas para tiempo: cronos y kairos. Una es la palabra cronos, que se usa para expresar el devenir del tiempo, y tiene la idea de día tras día, hora tras hora. La otra, kairos, tiene la idea de una porción definida de tiempo, un tiempo en donde algo debe de ocurrir. La palabra usada es este pasaje es kairos. La idea de kairos es de una temporada definida de oportunidad, que requiere redimir el tiempo. Eso implica capturar la oportunidad.

Cronos indica el tiempo cronológico y lineal, mientras que kairos indica una oportunidad o crisis que hay que aprovechar. El tiempo cronos es un tiempo cargado de tareas y gobernado por el reloj. El tiempo kairos es un tiempo cargado de significados, que puede ser comparado con la brújula como metáfora. Cronos y kairos representan dos enfoques, dos paradigmas, dos estilos de vida, dos formas de gestionarse personalmente. 

La idea detrás de aprovechando bien el tiempo es que necesitamos ser diligentes en aprovechar las oportunidades para hacer la voluntad de Dios, ser diligente para con Dios. La diligencia como rasgo de la sabiduría, es valiosa en la medida que está orientada a identificar y vivir conforme a la voluntad de Dios. En este contexto tiene que ver con la disposición a hacer la voluntad de Dios.