Restauración: Plan bíblico de lujoMuestra

Día 14: Nada más que ocultar

“Tengo mucho que decir pero no he dicho lo suficiente

Al negocio de la música lo llamé desilusión

No siendo lo suficientemente famoso

¿Qué importa si piensen si soy suficientemente salvo?

La gracia es suficiente

Mi donante de sangre dio lo suficiente”

Nunca es suficiente. Nunca logré lo suficiente, verme lo suficientemente santo, o decir las cosa correctas para recibir la aceptación que deseaba de otros. Por muy grande que sea tu éxito reciente, sigues sintiendo la presión de demostrarlo de nuevo. Probar tu valía, justificar tu valor (o eso nos decimos a nosotros mismos). En el mundo de hoy, las redes sociales nos recuerdan que alguien más lo hizo mejor y nosotros no estamos a esa altura.  

Se dice que esos pensamientos se deben combatir, que debemos decirnos constantemente cuán buenos somos. Pero Cristo murió por algo mayor, por otra manera de hallar nuestro valor. En vez de querer sacarlo de nuestro interior, Jesús, el Hijo de Dios que es nuestro gran Sumo Sacerdote, nos dijo que ya no tenemos que fingir. Él sabe que no podemos estar a la altura, sabe que no damos la talla. Ninguno de los héroes de la Biblia fue perfecto ni complacieron a todos.  

En Colosenses, Pablo nos muestra que podemos fijar nuestros ojos en algo fuera de nosotros mismos. Nuestro valor y nuestro precio nos fueron dados por el Creador del universo. No tenemos que luchar por encontrarlo en logros, popularidad, dinero ni en cosas que nunca darán satisfacción. Podemos ser honestos sobre nuestras limitaciones e ir hacia Cristo quien derramó Su sangre por nosotros, nos escogió, y nos llamó hijos suyos. Ya no tengo que actuar para obtener la aprobación del gentío porque no tienen el poder para definirme. Lo que valgo no se encuentra dentro de mi, está en Cristo quien me da valor. Tal como Pablo, podemos decir que servirle a Él es la libertad fundamental y así abandonar la presión de definirnos a través de los ojos de los demás.

Oración:  Señor ayúdame a fijar mis ojos en Ti cada vez que esté muy enfocado en mi mismo.