Confiando en el nombre

Por Danny Saavedra

“Dará a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados” (Mateo 1:21 NVI).

Los días anteriores hemos leído sobre algunos inesperados y sorprendentes personajes que son parte de la familia de Jesús. Desde Rahab hasta Josías y todos los demás, aunque sus historias eran diferentes, vemos que tenían algo en común: todos ellos confiaron y creyeron a Dios. 

Las personas que Dios eligió para que sean los padres de Jesús no eran diferentes. María era una joven que aún no estaba casada y su novio José era un carpintero pobre. Un día, un ángel se le apareció a María y le dijo que tendría un bebé y que su nombre sería Jesús. María estaba confundida. Todavía no estaba casada con José así que, ¿cómo podía tener un bebé? Aunque esto parecía una locura, ella confió en Dios. 

No nos olvidemos de José. Estaba en una situación difícil al saber que María esperaba un bebé. En ese tiempo, eso era un crimen muy serio y María pudo estar en un grave problema. Al igual que Maria, ¡José confío en Jesús! Cuando un ángel le dijo a José que se casara con María, él obedeció sin dudar. 

¿Qué haces tú cuando Dios te pide que hagas algo difícil? ¿Lo haces de buena voluntad o sólo ignoras a Dios? María y José obedecieron a Dios aunque era muy difícil para ellos. Cuando se trata de ser parte de la familia de Jesús, todo consiste en confiar en el nombre de Jesús.