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Hábito de felicidad: inversiones en la eternidad

Cada vez que eres generoso, inviertes en tu hogar eterno.

Jesús llamó a este principio "acumular tesoros en el cielo". ¡En realidad usó esta frase seis veces en la Biblia! Cada vez que Jesús dice algo seis veces, es mejor que prestes atención. Si no lo haces, te perderás la bendición.

La vida no se trata de almacenar cosas aquí en la Tierra. La vida se trata de almacenar cosas en el cielo. La Biblia dice que no almacene un montón de cosas aquí en la Tierra donde los ladrones pueden robarlo y el óxido y las polillas pueden destruirlo. Guarda tu tesoro en el cielo.

Eso tiene sentido. ¿Por qué? Porque pasarás mucho más tiempo en el cielo y vas a necesitar el botín y las recompensas mucho más en el cielo que en la tierra. Solo tienes 80 a 100 años en este planeta, y tienes que dejar todo atrás. ¡Pero podrás disfrutar de tu tesoro en el cielo por la eternidad!

Entonces, ¿cómo acumulas tesoros en el cielo? ¿Cómo los envías por adelantado?

La Biblia dice que lo haces invirtiendo en personas. Solo hay dos cosas que durarán para siempre: la Palabra de Dios y las personas. La gente pasará la eternidad en el cielo o en el infierno, y tu inversión en alguien podría marcar la diferencia. Dios quiere que inviertas en personas, porque esas inversiones tienen consecuencias y recompensas eternas.

Filipenses 4:17 dice, “No es que busque dádivas, sino que busco fruto que abunde en vuestra cuenta” (RVR1960).

Pablo escribió a los filipenses para expresar su agradecimiento por su apoyo, pero dijo que lo que más significaba, lo que le daba más alegría, era saber que su sacrificio y generosidad les daban un tesoro en el cielo. Ellos invirtieron en él, pero también invirtieron en su hogar eterno.

Serás recompensado por todo lo que has regalado. ¿Estás regalando tu tiempo? Serás recompensado en el cielo. ¿Estás regalando tu energía? Serás recompensado en el cielo. ¿Estás regalando tu dinero? Serás recompensado en el cielo.