Hábitos De FelicidadEjemplo

Hábito de felicidad: tu fe crece con tu generosidad

Cada vez que muestras generosidad, fortaleces tu fe.

¿Porqué es eso? Porque cuando tomas algo y, en lugar de usarlo en ti mismo, lo usas para ayudar a otros, entonces tendrás que depender de Dios para que te ayude.

Cuando eliges ayudar a un amigo que está teniendo dificultades para pagar sus cuentas, tendrás que aprender a confiar en que Dios te proveerá.

Si solo tiene una cierta cantidad de tiempo para hacer las cosas, pero se detiene y usa el tiempo para ayudar a su prójimo, debe confiar en Dios para expandir el tiempo y hacer que funcione para que pueda hacer sus cosas también.

Tu fe se fortalece cuando dependes de Dios en esas situaciones y confías en él. Eliges orar, en lugar de preocuparte y esperar a que Dios se ocupe de tus necesidades.

Filipenses 4:6 dice, “Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias.” (RVR1960).

Durante 33 años en Saddleback, hemos tenido seis momentos diferentes en los que pedimos a las personas que dieran más de lo que ofrendaban normalmente. En cada uno de esos tiempos, Dios extendió mi propia fe. De hecho, durante una campaña, Dios nos llevó a Kay y a mí a dar nuestro salario durante un período de tres años. ¿Crees que fué una prueba de fe? ¿Cómo rayos íbamos a vivir si diéramos todo mi salario a esta ofrenda (esto fue antes de que escribiera algún libro)? Significaba que durante esos tres años, tuvimos que confiar en que Dios de alguna manera proveería ingresos.

Eso fué una prueba de mi fe. Y cada vez que Dios me ha probado, mi fe solo se ha vuelto más y más fuerte a medida de que Dios proveyó fielmente. Dios hará lo mismo por ti cuando des generosamente.