Puedes correr, pero no puedes esconderteMuestra

Una de las mejores maneras de mantenernos fuertes cuando tenemos ganas de correr es re-alinearnos con la Palabra de Dios. La Palabra de Dios es una lámpara a nuestros pies. Nos recuerda que podemos hacer todas las cosas a través de su fuerza, nos recuerda orarpor aquellos que nos persiguen, nos recuerda esperar el tiempo de Dios y no forzar el nuestro. Su tiempo es perfecto en su temporada. Tenemos una tendencia a apresurar las cosas dentro de nuestras posibilidades, porque queremos lo que queremos, cuando lo queremos. Pero a menudo, Dios sabe mejor. Agar quiso huir, pero Dios le prometió que la bendición que le daría duraría generaciones, si volvía y se enfrentaba a sus problemas. 

Preguntas:

1. ¿Qué es lo que estás esperando de Dios en esta temporada? ¿Has estado tentado a rendirte?

2. Escribe dos escrituras de la Palabra de Dios que te animen a seguir adelante y léelas para ti mismo cada mañana.