[Grandes versos] Fortaleza para una iglesia arrepentidaMuestra

Apunta al cielo

No mirando nosotros las cosas que se ven, sino las que no se ven; pues las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas.

Debemos distinguir entre lo transitorio y lo eterno, entre lo perecedero y lo permanente. Aunque las cosas de este mundo preocupan a todos los que nos rodean, debemos escuchar continuamente la voz de Dios, que nos dice que vivamos por lo eterno, no por lo transitorio. Vive para el próximo mundo, no para este mundo. Es el hombre o la mujer sabios que viven con la perspectiva de la eternidad.

Hay una catedral en Milán, Italia, con una entrada notable. Para entrar, hay que pasar tres puertas sucesivas, cada una con una inscripción elaborada.

En la primera puerta grabada en piedra y coronada de rosas, se lee: «Todo lo que agrada es solo por un momento».

La segunda puerta presenta una cruz con el grabado, «Todo lo que son los problemas son solo por un momento».

La tercera puerta, la puerta más grande de ingreso al santuario, tiene la inscripción: «Solo es importante lo que es eterno». Vive para lo eterno, no para lo temporal. Vive por las cosas de Dios.

Si vives con esta perspectiva eterna, ¿significa que te perderás una vida plena y feliz en este mundo? En absoluto, todo lo contrario. Vivir para el próximo mundo es esencial para una vida plena en este mundo.

En «El mero cristianismo», C.S. Lewis señala: «Apunta al cielo y obtendrás la tierra, apunta a la tierra y no obtendrás ninguno».