Villancicos: Un devocional de NavidadMuestra

La canción de Navidad

Castañas asadas en un fuego abierto,
Jack Frost pellizcando tu nariz,
villancicos navideños cantados por un coro,
Y gente disfrazada de esquimales.

Si hay una canción que tiene el “espíritu navideño” es esta. Nos hace pensar en una escena de un cuadro de Norman Rockwell. O tal vez nos imaginamos a los cantantes de villancicos viniendo a nuestras puertas mientras les ofrecemos una sabrosa sidra de manzana caliente recién salida de la estufa. Asistimos a fiestas en casas de amigos y servicios en la iglesia. No nos olvidemos de estar todos abrigados la mañana de Navidad con nuestras familias mientras los copos de nieve más hermosos caen al suelo.

Y luego, en medio de nuestras ilusiones navideñas, nuestros hijos irrumpen en la habitación gritando "¡Mamá!" o "¡Papá!" porque alguien les pegó, o porque uno de ellos usó la pistola de perdigones del otro sin pedir permiso, o porque uno de los vecinos les quitó la pelota de baloncesto, o porque se cayeron de la tirolina. Oh, por el amor de todo lo que es bueno y correcto en el mundo, ¿no podemos quedarnos en nuestro pequeño paraíso navideño un poco más?

Así es la vida, ¿no? No importa cuán perfecto intentemos pintar el lienzo de nuestras vidas, siempre habrá algo extra que no estaba en nuestras mentes cuando lo soñamos. Algo que obstaculiza nuestra imagen perfecta. Algo que nos rompe el corazón.

Una relación que terminó.
Un ser querido que murió prematuramente.
La traición de un amigo.

¿Sabías que a Dios no le sorprenden las interrupciones en nuestra vida? De hecho, nada lo sorprende. No confundas las cosas malas que suceden en tu vida con Su pérdida de control. No, no se trata de Su habilidad sino de Su soberanía.

Si bien es posible que deseemos que las cosas malas nunca sucedan en nuestras vidas, sucederán. Jesús dijo que tendríamos problemas (Juan 16:33), pero también prometió que nos calmaría en medio de ellos (Juan 14:16). Entonces, no importa dónde estemos en la vida, ya sea que esperemos estar en el camino en el que estamos o no, ten la seguridad de que nuestro Dios puede hacer que las cosas rotas sean hermosas.

Amigo, sabemos que Dios dispone todas las cosas para el bien de los que le aman, los que han sido llamados conforme a su propósito (Romanos 8:28). Sigue adelante y confía en aquel que nunca te fallará.

Preguntas:

¿Cómo has visto a Dios en control en medio de las interrupciones de la vida?